VATICANO - LAS RAÍCES CRISTIANAS SON PARA EUROPA LA PRINCIPAL GARANTÍA DE SU FUTURO”: EL PAPA PROMULGA LA EXHORTACIÓN APOSTÓLICA “ECCLESIA IN EUROPA” EN LAS PRIMERAS VÍSPERAS DE LA SOLEMNIDAD DE SAN PEDRO Y SAN PABLO

lunes, 30 junio 2003

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) – “La ‘Buena Nueva’ ha sido y continua siendo fuente de vida para Europa. Si es verdad que el cristianismo no se puede reducir a alguna cultura particular, sino que dialoga con todas para orientarlas y expresar lo mejor de si en cada campo del saber y del actuar humano, las raíces cristianas son para Europa la garantía principal de su futuro. ¿Puede vivir y desarrollarse una árbol sin raíces? ¡Europa, no olvides tu historia!”. El llamamiento fue hecho el sábado 28 de junio por el Santo Padre Juan Pablo II durante las Primeras Vísperas de la Solemnidad de los Santos Pedro y Pablo en el curso de las cuales promulgó la Exhortación Apostólica Post-Sinodal “Ecclesia in Europa”.
“¡Tu eres Cristo! – repite esta tarde el sucesor de Pedro junto a sus Hermanos Obispos, sacerdotes y el pueblo cristiano de Europa y de todos los ángulos de la Tierra – dijo el Papa en la homilía -. El proclama esta verdad fundamental de la fe cristiana con vigor e profunda alegría. Sólo Cristo es el Redentor del hombre, sólo Cristo es nuestra esperanza. “Jesucristo, vivo en su Iglesia, fuente de esperanza para Europa”. Este era el tema de la segunda Asamblea Especial para Europa del Sínodo de los Obispos que tuvo lugar en el Vaticano del 1 al 23 de octubre de 1999. Con alegría esta tarde firmo y entrego la Carta Apostólica ‘Ecclesia in Europa’ que recoge y elabora cuanto surgió en el curso de tan significativa reunión sinodal”.
El Papa recorrió después la historia bimilenaria del Cristianismo en el continente: “Desde la orilla oreintal del Mediterráneo, el mensaje evangélico llega a través del imperio romano para implantarse después en las ramificaciones etnicaza y culturales presentes en el Continente europeo”. No dejó de recordar después que “a lo largo de los siglos, la contaminación debida a los límites y pecados de algunos miembros de la Iglesia” provocó dolorosas divisiones que en Europa “hirieron el Cuerpo Mastico de Cristo”.
“En el siglo XX, el Espíritu Santo ha suscitado, sin embargo, una nueva primavera que se hace fecunda en el testimonio de muchos santos y mártires. Una profunda renovación espiritual surgió gracias al Concilio Ecuménico Vaticano II – prosiguió el Papa -. “¡Tu eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo!”. La profesión de fe de Pedro no ha venido a menos en la Iglesia, a pesar de las dificultades y las prueba que han marcado el camino bimilenario del pueblo cristiano. La carta Apostólica que esta tarde entrego simbólicamente a los Obispos, presbíteros y diáconos, a los consagrados y a los fieles laicos de Europa, es una invitación a renovar esta adhesión sin reservas a Cristo y a su Evangelio. ¡Solo Tu Jesucristo vivo en tu Iglesia, eres fuente de esperanza!”. . (S.L.) (Agencia Fides 30/6/2003 Líneas: 38 palabras: 512)


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