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Pekín (Agencia Fides) - "El testimonio vivo es el mejor modo de evangelizar. Es importante el anuncio oral, pero nuestro comportamiento tiene una fuerza extraordinaria y determinante en la evangelización. Pensamos en el ejemplo de la Madre Teresa": son las palabras de don Meng Ning You, sacerdote de la Catedral de la diócesis de Tai Yuan, en la provincia de Shan Xi, pronunciado durante la homilía dominical y aplaudidas por los fieles presentes. "Nuestra palabra, nuestro comportamiento representan a la Iglesia, representan la fe que profesamos - ha continuado el sacerdote -. El mes de la Misión y la Jornada Misionera Mundial han pasado, pero esto no significa la clausura de la misión, antes bien, se ha sido dado un nuevo inicio para poner en marcha la acción misionera."
La misma convicción también ha emergido durante el "Tercer Encuentro de Convivencia de la Fe de los Amigos de Faith", que ha tenido lugar hace unos días en Shi Jia Zhuang. Durante el encuentro dos representantes de la comunidad católica de Wei Nan, en la provincia de Shaan Xi, han contado su experiencia. En la aldea dónde viven existe un Grupo de Evangelización. Llegada la estación de la recogida, una chica de la aldea que estaba preparando el examen para el ingreso en la universidad y que había perdido a su padre y madre, se encontró que debía segar un inmenso campo de trigo. Además ella esperaba esta cosecha para poder pagar los gastos escolares y poder vivir. “Necesitaba al menos un mes para segar ellas sola, contando con que fuera capaz de hacerlo sola” decían los paisanos. Sin que ella pidiera nada, el Grupo de Evangelización se puso enseguida manos a la obra. En tres días han recogido todo el trigo y pagado el gasto universitario para la chica. Hoy la joven es una estudiante universitaria, una catecúmena y también una activa evangelizadora en la universidad. Conociendo sus límites sobre el conocimiento de la fe cristiana, por medio de un intercambio de cartas y llamadas con los miembros del Grupo de Evangelización recibe toda la información necesaria y luego las comparte con los compañeros de la universidad. Gracias al vivo testimonio del Grupo, el número de católicos de la aldea ha aumentado en pocos años a más de 200. El catecismo, la actividad pastoral, el compartir la Sagrada Escritura son los elementos fundamentales que regulan el ritmo de la vida de la comunidad. (NZ) (Agencia Fides 25/11/2006 Líneas: 29 Palabras: 426)
