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Manila (Agencia Fides) - Junto a los rascacielos y a las villas residenciales, un inmenso vertedero de basura se extiende en la metrópoli de Manila. En la zona de Quezon City se encuentra el vertedero de Payatas, que cubre un área de 25 hectáreas y forma una montaña de basura de 45 metros. Payatas es universalmente conocido como "smokey mountains" ("montañas humeantes") ya que el área está perennemente cubierta de humo por las exhalaciones y la auto combustión de los propios restos. En este inmenso vertedero, herida infecta en el corazón de la ciudad, formada ya en 1945, viven establemente más de 25.000 personas, en la miseria y en el deterioro más absoluto, mientras que el número de los que viven en condiciones de pobreza extrema llega a 100.000 si se considera el cercano asentamiento de barracas del barrio de Tondo. Y esta porción de humanidad está abandonada a sí mismo, a su pobreza. No tiene tampoco una iglesia dónde rezar.
El P. Benigno Beltran, cura de la iglesia de la "Resurrección de Cristo" en Manila, señala que la vida de esta gente se encuentra bajo el umbral de la dignidad humana. El sacerdote centra su acción pastoral en restituir un tenor de vista digna a estas personas. Además de las ayudas económicas y de intentar llevar a los jóvenes a la escuela y a la formación profesional, el sacerdote ha puesto en marcha las "Comunidades Eclesiales de Base", cada una compuesto por 10-15 familias que se reúnen regularmente para leer el Biblia y compartir sus experiencias.
Lo que falta, cuenta el p. Beltran, es una iglesia que pueda acoger a las familias pobres en Payatas. Por ello, se ha activado la red internacional de “Ayuda a la Iglesia necesitada” que ha lanzado un llamamiento y está tratando de recoger los 900.000 euros necesarios para la construcción de la obra. "Además de las ayudas materiales, además del interés de las autoridades civiles de Manila para tratar de eliminar el infierno de los "smokey mountains", además de la campaña para dar una casa a las familias más pobres, las personas que viven en el área de Payatas - recuerda el P. Beltran - también necesitan un lugar dónde rezar, celebrar los Sacramentos, cultivar la fe, encontrar consuelo y asistencia espiritual". (PA) (Agencia Fides 3/6/2006 Líneas: 27 Palabras: 395)
