ASIA/SIRIA - Alepo, el obispo Audo: tras 12 años de guerra, el terremoto cae sobre nosotros como una nueva bomba

lunes, 6 febrero 2023 oriente medio   iglesias orientales   catástrofes naturales   terremoto   refugiados  

Alepo (Agencia Fides) - «Ahora es aún más importante estar cerca de la gente, que está aterrorizada por este terremoto». Para el jesuita Antoine Audo, obispo caldeo de Alepo, «entre las muchas catástrofe que hemos sufrido, ésta es una a la que, por así decirlo, no estamos acostumbrados. Tras doce años de guerra, ésta es una nueva bomba terrible, letal y desconocida, que cae sobre nosotros».
El terremoto que sacudió el sur de Turquía y el centro-norte de Siria a las 4.17 hora local del lunes 6 de febrero ha sido el más violento de los últimos ocho siglos. Así lo informa Marlène Brax, directora del centro geofísico libanés, entrevistada por el diario libanés L'Orient-Le Jour. El seísmo ha registrado una magnitud de 7,8 grados en la escala de Richter, y su epicentro ha sido el sur de Turquía.
El obispo caldeo de Alepo describe a la Agencia Fides «una ciudad de dos millones y medio de habitantes sin electricidad, agua ni calefacción. Hace mucho frío, el invierno es duro. Veo a gente que se queda en la calle o se encierra en el coche. Tienen miedo, no saben qué va a pasar, porque quizá no haya terminado, y hay rumores de que podrían producirse nuevos temblores fuertes y devastadores». De hecho, un nuevo temblor de magnitud 7,6 se ha registrado ya en la provincia meridional turca de Kahramanmaras a las 13.24 hora local, y también se ha percibido en Damasco.
En Siria, el balance provisional comunicado por fuentes oficiales sirias, que desgraciadamente está destinado a aumentar, habla por ahora de 371 muertos y más de mil heridos por el seísmo. Además, se cuentan por centenares las víctimas en zonas sirias fuera del control del gobierno de Damasco.
Las iglesias de la zona también están empezando a hacer balance de la devastación que han sufrido como consecuencia del terremoto. En Turquía, Mons. Paolo Bizzeti, Vicario Apostólico de Anatolia, ha informado de que la catedral de Iskenderun se ha derrumbado, y en esa ciudad también han quedado destruidas las iglesias de las comunidades siro-ortodoxa y ortodoxa. «Aquí en Alepo - ha dicho a la Agencia Fides Mons. Audo - el arzobispo melquita Georges Masri ha sido extraído con vida de entre los escombros, pero su Vicario sigue bajo el edificio destruido, y todavía no lo han encontrado».
(GV) (Agencia Fides 6/2/2023)


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