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Roma (Agencia Fides) - Ante la emergencia alimenticia en África Oriental, Caritas Internationalis ha lanzado un llamamiento invitando a la solidaridad internacional. La agencia católica ha pedido 1.200.000 dólares para nutrir a mujeres, niños y personas ancianas en Kenia, dónde los víveres alimentarios apenas llegan a las personas que más los necesitan.
En una relación sobre la emergencia alimentaria elaborada por Caritas Kenia se afirma que algunas personas han muerto y que 3 millones y medio de kenianos sufren por el hambre y necesitan el envío urgente de comida. "La prioridad es obviamente impedir que haya más pérdidas de vidas humanas" afirma Mons. Martin Kivuva, Presidente de Caritas Desarrollo de Kenia.
La organización caritativa católica ha elaborado un proyecto para asistir a 45.000 personas, de las cuales más de 30.000 recibirá directamente ayudas comestibles y más de 14.000 recibirán también alimentos suplementarios sumamente energéticos. El programa está dirigido de modo especial a niños y mujeres malnutridas, incluidas mujeres embarazados y en fase de lactancia, que necesitan una integración alimenticia.
El programa tiene el objetivo de llegar hasta las personas que no están recibiendo comida del programa de distribución alimenticia del gobierno o de organizaciones no gubernamentales internacionales. Según los datos recogidos por diversas diócesis kenianas, muchas personas no han recibido todavía comida. Por ejemplo, en Isiolo, una de las aéreas principalmente afectadas por la sequía, las raciones gubernativas sólo han alcanzado el 10% de la población. En algunas áreas, la población malnutrida está demasiado debilitada y no consigue llegar hasta los centros de distribución alimenticia. Caritas quiere ayudar a estas personas así como a los enfermos que tienen SIDA y que no están en condiciones de poder recoger la comida por si solos.
Caritas Kenia controlará al proyecto, en colaboración con otras organizaciones caritativas católicas, para asegurar la máxima transparencia en la distribución alimenticia, para evitar que los víveres destinados a quienes realmente los necesitan, sean vendidos ilícitamente en el mercado.
Se prevé también ofrecer a 18.000 campesinos en el Noreste de Kenia semillas resistentes a la sequía que serán utilizadas cuando vuelvan las lluvias.
Otros 45.000 dólares son necesarios para llevar comida a Djibouti, zona en la que repetidas carestías han puesto en peligro la vida de más de 150.000 personas. La situación está destinada a empeorar porque las lluvias que normalmente se producen de octubre a febrero no han llegado todavía.
La falta de lluvias ha afectado sobre todo a los pastores que dependen de los tanques de agua pluviales y de la hierba de las praderas para alimentar el propio rebaño. Su única fuente de sustentación económica deriva de la venta de leche y carne de los animales, lo que les permite comprar otra comida. Pero como los animales están ahora esqueléticos, no pueden ya obtener esta renta y los ganaderos se ven obligados a ampararse en la ciudad en busca de comida.
Caritas Djibouti prevé ofrecer ayudas alimenticias a 200 familias dentro del País, utilizando la red de las misiones católicas del País.
Son más de 8 millones las personas en peligro por la carestía que ha golpeado Etiopía, Somalia, Kenia y Djibouti. (L.M) (Agencia Fides 16/272006 Líneas: 42 Palabras: 548)
