ASIA/COREA DEL SUR - Evangelizar a los jóvenes: prioridad de la Iglesia coreana en los próximos años

jueves, 3 noviembre 2005

Seúl (Agencia Fides) - La evangelización de las nuevas generaciones será una de las prioridades de la Iglesia coreana en los próximos años, afirma Su Exc. Mons. John Choi Young-soo, Presidente de la Comisión Episcopal para la evangelización, en un mensaje enviado recientemente a todas las diócesis, parroquias, movimientos e institutos católicos. "Recordando que numerosos cristianos fueron martirizados por la misión, debemos reafirmar que la misión esencial de todo cristiano es llevar la Buena Nueva a cuantos todavía no conocen a Cristo", afirma el Mensaje.
El Obispo señala que, dados los últimos datos en posesión de la Iglesia coreana, es necesario orientar las estrategias de evangelización hacia los jóvenes. Desde el 2000 en efecto, el número de católicos por debajo de los 40 años en Corea ha ido decreciendo, a causa de la disminución de niños bautizados. Además el paro engendra en los jóvenes problemas económicos y una general depresión que los aleja de los valores evangélicos.
Hay que encontrar nuevas estrategias y modalidades, en sintonía con el espíritu evangélico, para hablar a los jóvenes de la "generación del Internet", afirma el Obispo. "Es necesario escuchar a los jóvenes y aprender a responder a sus necesidades. Tenemos que proclamar a Jesucristo como libertador y como Buen Pastor."
El mensaje ofrece a las diversas comunidades católicas sugerencias concretas, para una auténtica evangelización de los jóvenes:
- la importancia del bautismo de los niños, contrastando la tendencia a ofrecer el bautismo en edad adulta;
- la formación cristiana en edad pre-escolar, que constituye un buen fundamento para una vida cristiana;
- la formación religiosa para los estudiantes ya desde las escuelas elementales, haciendo que los mimos jóvenes se conviertan "agentes de apostolado";
- la misión en los campus: por medio de pastores, profesores, estudiantes, que pueden promover iniciativas culturales, sociales, de diálogo y de encuentro;
- reforzar la formación cristiana de las parejas que se preparan al matrimonio, aumentando el sentido de responsabilidad en quienes quieren vivir el Sacramento;
- acercar a los jóvenes trabajadores, que deben tener asistencia material y espiritual.
El Obispo ha subrayado por último, la importancia de la familia cristiana como lugar en que los jóvenes pueden ver un testimonio concreto de los valores cristianos y recibir en herencia un patrimonio de fe. Recordando la urgencia de la misión evangelizadora de la Iglesia, el Mensaje concluye con las palabras de san Paolo: "¡Ay de mi si no evangelizara!” (1 Cor 9,16). (PA) (Agencia Fides 3/11/2005 Líneas: 35 Palabras: 420)


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