ASIA/FILIPINAS - Reconocer los signos de tiempos, escuchar la "grey de fieles: concluye la Asamblea Pastoral de la archidiócesis de Manila, con la presencia de 2.000 delegados

lunes, 24 octubre 2005

Manila (Agencia Fides) - “Todos nosotros queremos ser un pueblo llamado por Dios Padre que llegue a ser, en Jesucristo, una comunidad de personas con una vida vivida en plenitud, que testimonie el Reino de Dios viviendo el misterio Pascual, bajo la acción del Espíritu Santo, junto a Maria". Es el llamamiento pronunciado en nombre de la comunidad de fieles de Manila, por Su Exc. Mons. Gaudencio B. Rosales, celebrando ayer 23 de octubre la Santa Misa conclusiva de la asamblea Pastoral General de la archidiócesis de Manila.
La asamblea, que del 21 al 23 de octubre se ha enfrentado a las perspectivas pastorales de la Iglesia en la capital filipina, ha estado constituida por unos 2.000 delegados entre sacerdotes, religiosos, religiosas y laicos. La Asamblea Pastoral ha apuntado hacia su desarrollo, sobre todo con una atenta escucha de las necesidades, de las dificultades, de las cuestiones pastorales prioritarias presentadas por parroquias, institutos religiosos, movimientos y asociaciones. El patrimonio de experiencias emergido servirá para modelar y actuar estrategias pastorales adecuadas a la situación de la comunidad diocesana.
"Para llevar adelante la tarea de la evangelización, la Iglesia tiene la responsabilidad de leer los signos de los tiempos e interpretarlos a la luz del Evangelio. (…) Para nosotros en la Iglesia la grey de los fieles tiene algo que decir para la visión de las cosas, porque una buena visión incluye las necesidades y experiencia del Pueblo de Dios", ha subrayado el arzobispo. "Una buena visión es aquella centrada en la Palabra de Dios. Dios confirma los buenos deseos de cada persona".
La Asamblea Pastoral ha sido la primera en la historia de la archidiócesis. Según los participantes, ha sido también "una expresión concreta de comunión para dar gracias al omnipotente de un Pueblo de Dios preparado para la adoración y el servicio".
El acontecimiento ha puesto fin al Año Eucarístico y Mariano, que comenzó en octubre de 2004 en la archidiócesis de Manila. La Iglesia filipina lo ha vivido con especiales oraciones, tratando de difundir en todo el país la sensibilidad y el amor hacia la Eucaristía. En particular, la archidiócesis de Manila ha promovido vigilias de oración y Adoración Eucarística, rezo del Rosario dedicados a la vida de la nación, congresos y profundizaciones sobre los temas de espiritualidad eucarística. (PA) (Agencia Fides 24/10/2005 Líneas: 30 Palabras: 406)


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