ASIA/FILIPINAS - "El país supera la crisis y se enfrenta con los problemas más urgentes", dice el Arzobispo Fernando Capalla, Presidente de la Conferencia Episcopal

martes, 13 septiembre 2005

Manila (Agencia Fides) - Evitar luchas políticas inútiles y contraproducentes; superar la crisis y mirar al futuro para afrontar y solucionar los problemas más urgentes que vive el país como es la pobreza; continuar en la búsqueda de la verdad, pero en el respeto de la ley y del orden constituido. Son los puntos principales del comunicado de la Conferencia Episcopal de Filipinas, reunida hoy en Manila, interviniendo con un breve documento sobre la crisis político que ha atravesado el país en los últimos meses.
La presidenta de Filipinas Gloria Arroyo ha estado en efecto sometida a tres procedimientos de impeachment por acusaciones de corrupción y fraudes electorales durante las elecciones presidenciales del 2004, pero en los tres los casos el Congreso la ha juzgado inocente.
El comunicado de los Obispos fue leído por Mons. Fernando Capalla, Presidente de la Conferencia Episcopal, quien ha subrayado como la Iglesia desde el principio rechazó de dejarse llevar por la disputa, toda política, entre gobierno y oposición que ha agitado la escena nacional en los últimos meses, reafirmando la necesidad de que la política filipina siga criterios de transparencia y honestidad, abandonando las formas de corrupción que erosionan el servicio dentro de la pública administración.
La Iglesia católica también publicó un documento en julio pasado, en la fase más aguda de la crisis, que ha tenido incluso tintes sociales y protestas en la calle..
Ayer, 12 de septiembre, la presidenta Gloria Arroyo habló a la nación para cerrar el capítulo de la reciente lucha política, anunciando su participación en la Cumbre Mundial de las Naciones Unidas, dónde se discutirán sobre los objetivos del milenio, los problemas del terrorismo internacional y los derechos humanos. Arroyo presidirá la cumbre del Consejo de seguridad ONU, primer Jefe de estado de una nación asiática y primera mujer que desarrollar este papel en la historia de las Naciones Unidas.
El 12 de septiembre se ha vivido en Filipinas como Jornada de oración para la unidad de la nación: un día en el que la presidenta ha reafirmado su compromiso por el desarrollo del país y por el bienestar de los ciudadanos: "Oración, conversión y reparación pueden servir para alcanzar los objetivos por el bien de la nación", ha dicho, condenando a los detractores que han intentado desestabilizar el país.
Aunque Arroyo haya sido absuelto por el Congreso, algunos segmentos de la sociedad civil continúan acusándola de corrupción y piden su dimisión. (PA) (Agencia Fides 13/9/2005 Líneas: 33 Palabras: 428)


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