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Roma (Agencia Fides) - La enfermedad del sueño, causada por la mosca tsetsé, provoca cada año millares de víctimas y por desgracia no existen todavía tratamientos eficaces para combatirla. Ahora la alarma está en fuerte ascensión en el sur de Sudán.
Casi el dos por ciento de la población sometida a los análisis resulta infectado y la preocupación es más que justificada dado que se habla de epidemia cuando se tiene un porcentaje de infecciones del 4%. Tambura y la cercana aldea de Ezo, se encuentran en lo que es considerado el epicentro de la franja africana de la enfermedad del sueño, que parte de Senegal y recorre todas las zonas tropicales hasta el oeste de Uganda.
Desconocida en la mayor parte del mundo esta enfermedad, llamada también tripanosomiasis, afecta entre 300.000 y 500.000 personas en los países pobres. Se contrae por la picadura de la mosca tsetsé y, a pesar de que los síntomas pueden no aparecer enseguida, si no se cura puede ser letal.
En la fase inicial la enfermedad no presenta síntomas alarmantes, únicamente dolor de cabeza, fiebre y sentimiento de cansancio. Pero, en la segunda fase, el parásito afecta el sistema neurológico y puede llevar a convulsiones, insomnio por la noche y modorra de día, hasta provocar el estado de coma y la muerte.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el tripanosomiasis africano causa cada año 60.000 víctimas, y 60 millones de personas en 36 países del África subsahariana corren el riesgo de ser infectadas.
La versión latinoamericana, llamada tripanosomiasis americano o enfermedad de Chagas, ha infectado entre 16 y 18 millones de personas y otros cien millones están expuestas a la infección en 21 países.
Lo más grave es que, en ambos casos, la investigación para el desarrollo de fármacos más eficaces es casi inexistente. (AP) (7/9/2005 Agencia Fides; Líneas: 27 Palabras: 327)
