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Katmandú (Agencia Fides) - "En el valle de Katmandú la situación está bastante tranquila. Pero en el resto del país oímos todos los días noticias sobre enfrentamientos, muertos, zonas militarizadas. Estamos en una fase muy delicada y la población está sufriendo por la guerra civil": afirma en un coloquio con la Agencia Fides el P. Piu Perumana, Pro Prefecto Apostólico en Nepal, mientras la guerra civil entre los rebeldes maoístas y las tropas gubernativas no conoce tregua.
El P. Pius cuenta a Fides que la comunidad católica "intenta continuar adelante haciendo todo lo posible: algunas escuelas católicas en los distritos periféricos están abiertas, otras se han visto obligadas a cerrar debido a los combates para proteger a los niños. Esperemos que la situación mejore rápidamente. Todos los días pedimos para que el Señor conceda paz y reconciliación a nuestro pequeño país."
El Padre Pius dice a Fides que también el nuevo Centro Pastoral, abierto desde hace aproximadamente un año por la Iglesia en Katmandú, desarrolla actualmente actividades a medio servicio: muchos programas de animación dedicados a niños y jóvenes han sido cancelados, pero se consigue realizar las liturgias y las catequesis.
Los enfrentamientos arrecian en los distritos de Udayapur (Nepal oriental), Rukum (Nepal occidental), una de las fortalezas de los guerrilleros. Según datos oficiales difundidos por el ministerio de información nepalí, en los últimos meses han sido 600 los rebeldes que han muerto, 659 los civiles y 900 los caídos entre las filas de las fuerzas de orden.
En Nepal grupos de rebeldes combaten desde hace nueve años contra la monarquía para establecer un régimen comunista, en un conflicto que ha provocado 11.000 muertos. Recientes tentativas de mediación o de abrir una mesa de negociación han fracasado y los rebeldes todavía controlan militarmente algunas zonas del país. En este cuadro, también en la comunidad católica circula cierta preocupación, aunque no han sido tocados los derechos adquiridos de libertad de culto y de practicar la propia fe. Recientemente algunas organizaciones internacionales han denunciado que se ha agravado situación humanitaria en Nepal, pidiendo que una misión ONU pueda entrar en el país y examinar la situación.
La comunidad católica en Nepal cuenta con 7.500 almas. La Iglesia, con sus 23 escuelas, consigue ofrecer instrucción a numerosos jóvenes nepaleses, sobre todo no cristianos y ofrece a los de las familias más pobres becas para el extranjero. (PA) (Agencia Fides 20/5/2005 Líneas: 32 Palabras: 415)
