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Bogotá (Agencia Fides) - La Presidencia del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) ha dado a conocer que el Santo Padre Juan Pablo II, ha acogido la petición de convocar la V Asamblea General del Episcopado Latinoamericano, para el mes de febrero del 2007 en Roma.
En su intervención durante la Rueda de Prensa para la presentación del acontecimiento, que se ha tenido en la sede de la Secretaría General del CELAM en Bogotá, el Card. Francisco Javier Errazuriz, Arzobispo de Santiago de Chile y Presidente del CELAM, han delineado el contexto socio-cultural en que se introduce la próxima Conferencia, y ha anunciado el tema en el que se inspirará, que salvo ulteriores cambios, será: "Discípulos de Jesús Cristo en la Iglesia Católica, misioneros de esperanza, para la nueva evangelización de América Latina y Caribe al inicio del Tercer Milenio". El Presidente del CELAM ha señalado que la pastoral tiene que llevar al encuentro con Jesucristo vivo, de este encuentro depende la calidad del discípulo: "Los discípulos de Jesucristo son los que han encontrado al Señor, lo han conocido, lo han escuchado, han aprendido de Él y lo han seguido, compartiendo con Él su misión."
El Secretario General del CELAM, Mons. Andrés Stanovnik, Obispo de Reconquista (Argentina), explicando los motivos de la convocación de una nueva Asamblea General del CELAM, ha señalado que los continuos cambios que surgen dentro de la sociedad hacen necesario que la Iglesia se reúna para discernir, para ver juntos lo que está sucediendo, que hay de válido y que puede ser una amenaza. El objetivo de la V Conferencia General "es el situarse frente a la realidad con el mensaje de Jesús, para iluminarla y tratar de ver". Ilustrando este objetivo, Mons. Stanovnik ha subrayado que el episcopado latinoamericano está hoy muy preocupado por la diferencia existente entre lo que se cree y lo que se practica y por la proliferación de las sectas, a veces agresivas contra la Iglesia Católica. Éstas disgregan las comunidades, no inciden en la transformación de la convivencia social, suscitando un sentimiento religioso que no lleva a un compromiso transformador de la sociedad. Estos nuevos desafíos que desgraciadamente son comunes en América latina y Caribe, hacen urgente la necesidad de que los Pastores del pueblo Dios estén más cercanos a las familias, a los sacerdotes y a las comunidades, de las que son responsables. "Sentimos la necesidad de estimular, de solicitar a la Iglesia en América latina a vivir en un estado de misión permanente" ha añadido Mons. Stanovnik. (R.Z) (Agencia Fides 1/7/2004; Líneas: 33 Palabras: 458)
