AMERICA/ESTADOS UNIDOS - Informe de la FAO: crisis alimentaría gravísima en 32 países de África, Asia y América Latina; preocupación por la sequía en China y Argentina

jueves, 19 febrero 2009

New York (Agencia Fides) - Los problemas que están naciendo de la grave crisis alimentaría, que está golpeando regiones enteras del planeta, afecta a millones de personas, en particular del sur del mundo. En efecto son treinta y dos los países que en África, Asia y América Latina sufren de una gravísima incerteza alimentaría. A pesar de la cosecha record del 2008 la producción de cereales mundial en este año sufrirá una consistente disminución. Este es el cuadro anunciado por el último reporte de la FAO en el que se analizan las futuras cosechas y la situación alimentaría (“Crop prospects and Food Siutation”).
Las causas de la disminución de la producción de cereales, que afecta a la mayoría de los países productores, hay que atribuirlas – según las estimas de la FAO – tanto a las poco favorables condiciones climáticas como a una disminución de los sembríos. En Occidente (Europa y Estados Unidos) los elevados costos de los recursos necesarios para la producción agrícola y las previsiones de una menor ganancia en relación al 2008 explican la reducción de la producción, a pesar de las condiciones climáticas que en el conjunto son buenas.
En los países en vías de desarrollo, en todas las áreas del planeta en el que las necesidades alimenticias de la población están por debajo de lo necesario, la baja producción de cereales prevista para este año 2009 no depende de una opción calculada sino más bien de malas condiciones climáticas. Largos periodos de sequía están golpeando el continente asiático. En China esta situación esta determinando una notable disminución en la producción del grano de invierno. Mientras que en Sudamérica la falta de lluvias – que está afectando desde el año pasado a Argentina – se refleja de manera directa e la producción de los llamados cereales secundarios (maíz, avena, cebada, grano duro).
A pesar de eso, gracias a la excepcional producción de cereales del 2008, en relación a su uso en los años 2008-2009, las reservas para el 2009-2010 han sido calculadas en 496 millones de toneladas, nivel que no se había alcanzado desde el 2002. Esta confortante previsión – según el organismo de las Naciones Unidas – podría reducir el desequilibrio entre la oferta y la demanda en aquellos países en los que la emergencia es más aguda. Pero lamentablemente en estos países los precios de los alimentos están creciendo en el mercado interno, y los que pagan las consecuencias son los más pobres. En América Central y en África Austral el fenómeno es más marcado, mientras que en la parte occidental del continente africano es menos acentuado. Países pobres del Asia como Afganistán, Pakistán y Sri Lanka se han sido también afectados por la subida de los precios.
En algunos países de África, Asia y América Latina la crisis alimentaría es particularmente preocupante. El informe ha identificado treinta y dos, veinte de los cuales se encuentran en el continente africano. Sólo en África oriental son más de 18 millones de personas las afectadas, mientras que se calcula que en África austral el número total de personas que sufren de inseguridad alimenticia son casi 8,7 millones. Las causas principales hay que buscarlas en los conflictos, en los desórdenes internos y en las malas condiciones climáticas. A esto hay que añadir también la crisis económica general. (Mtp) (Agencia Fides 19/2/2009; 40 líneas, 570 palabras)


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