Organo de informacion de las Obras Misionales Pontificias desde 1927
Lima (Agencia Fides) – La Arquidiócesis de Lima se une en oración en el décimo Aniversario del inicio del ministerio episcopal del Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne en la Arquidiócesis. Al ser la oración el mayor obsequio espiritual que los fieles y sacerdotes de la Arquidiócesis de Lima pueden ofrecer al Cardenal Cipriani, se ha establecido el Triduo de Oración en honor al X Aniversario del inicio de su ministerio pastoral como 32º Arzobispo de Lima y Primado del Perú.
El Triduo se llevará a cabo durante la última semana del mes de enero en todas las parroquias de la Arquidiócesis de Lima, durante los tres días que cada párroco considere más oportunos, con el propósito de unirse en la oración por la persona e intenciones del Pastor de Lima y como preparación para la Eucaristía que se celebrará el viernes 30 de enero en la Catedral de Lima a las 7:30 pm.
El primer día de oración está dedicado al Señor de los Milagros, Patrón de la ciudad de Lima, para suplicar ante su imagen por la salud e intenciones del Cardenal.
El segundo día de oración está dedicado a Nuestra Señora de la Evangelización, Patrona de Lima, para encomendar al Arzobispo a la Virgen Santa María, para que así como acompañó a los anteriores Arzobispos de Lima, también lo acompañe en su ministerio Episcopal.
Finalmente, el tercer día de oración está dedicado a Santo Toribio de Mogrovejo, Segundo Arzobispo de Lima y patrono del Episcopado Latinoamericano, para que iluminados por su vida y obras podamos reflexionar sobre la acción pastoral del Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne, como la expresión de la voluntad de Cristo en la Iglesia Particular de Lima.
En el marco de las celebraciones por el X aniversario el viernes 9 de enero, el Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne recibió la condecoración de la Orden “El Sol del Perú”, en el Grado de Gran Cruz, por el Ministro de Relaciones Exteriores y Canciller de la República, Embajador José Antonio García Belaunde, a nombre del Estado peruano por su contribución a la unión y paz entre peruanos. El Canciller de la República manifestó que “el Gobierno del Perú ha decidido que a los diez años de haber sido designado por el Papa Juan Pablo II, Arzobispo de Lima, entregar esta condecoración que tiene un doble mensaje. En primer lugar, un reconocimiento a esta vasta trayectoria de Pastor, de un hombre dedicado al ejercicio de su vocación y a satisfacer las necesidades de los más débiles. En segundo lugar, destacar el profundo respeto que el Estado Peruano mantiene por la Iglesia Peruana, a la que considera elemento esencial de la cultura y de la identidad nacional”.
Por su parte el Card. al recibir el premio quiso renovar “el compromiso que la Iglesia realiza no solo al servicio del crecimiento del pueblo peruano en la fe y en la vida cristiana, sino también en su progreso en las sendas de la concordia y de la paz. Cuando el mensaje de Cristo es acogido, la comunidad civil se hace también más responsable y atenta a las exigencias del bien común y más solidaria con las personas pobres, abandonadas y marginadas”. (RG) (Agencia Fides 27/1/2009)
