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Nueva Delhi (Agencia Fides) – Huelga y protesta nacional de los extremistas hindúes con ocasión de la Navidad 2008: es lo que han anunciado algunas de las organizaciones radicales hinduistas, responsables de la violencia anticristiana registrada en Orissa y en otros estados de la India durante los meses pasados.
El Vishwa Hindu Parishad ha anunciado para el 25 de diciembre una huelga de 12 horas en Orissa y una manifestación de protesta por el fallido arresto de los responsables del homicidio del líder hindú L. Saraswati. El asesinato del líder (sucedido en agosto probablemente por obra de grupos rebeldes maoístas), del que fueron culpados falsamente los cristianos, fue el pretexto utilizado por las organizaciones hindúes para desatar la violencia anticristiana en Orissa en los meses pasados.
La comunidad cristiana en Orissa está en alarma, pues teme una nueva ola de violencia: muchos recuerdan la Navidad del 2007, en la que se registraron numerosos actos de violencia en perjuicio de la comunidad cristiana (ver Fides 21 y 29/1/2008), en una campaña que presagiaba las agresiones acaecidas después en agosto del 2008.
Los cristianos han recibido garantías de protección por parte de las autoridades civiles, en particular, del gobernador de Orissa, naveen Patnaik, y del Ministro de Asuntos Internos de la India, P. Chidambaram, pero de todos modos el miedo reina entre las familias, ya que las heridas y las dolorosas huellas dejadas por la reciente violencia están todavía vivas en la memoria de las víctimas.
“No obstante haber sido asegurados por las autoridades, estamos sumamente preocupados. La huelga y la protesta de los radicales hindúes son una clara provocación, que podría incitar los ánimos al odio y a la violencia. Pedimos a los políticos, a la policía, a los mass-media y a la sociedad civil en Orissa que defiendan la paz y la estabilidad. Pedimos que se impida a los miembros de grupos extremistas hindúes entrar en masa a Orissa, en particular el distrito de Kandhamal, ya fuertemente golpeado por los ataques anti-cristianos”, afirman los fieles de todas las confesiones reunidos en la organización “All India Cristian Council”.
Según los datos proporcionados por la Agencia Fides y la Conferencia Episcopal de la India, los datos de la violencia anti-cristiana en los campos de prófugos predispuestos por el gobierno hasta el 15 de diciembre del 2008, son los siguientes: 81 personas asesinadas; 22,236 presentes en campos de prófugos predispuestos por el gobierno y más de 40 mil personas fugadas del distrito de Kandhamal; 450 poblados afectados por los desórdenes; 4,677 casas destruidas; 236 iglesias y 36 entre conventos, institutos y aulas religiosas demolidas. (PA) (Agencia Fides 22/12/2008; líneas 31, palabras 430)
