AMERICA/PERU - Mensaje de Adviento de los Obispos “un buen momento para la conversión, el perdón y la reconciliación que todos debemos poner en práctica para una convivencia fraterna”

miércoles, 3 diciembre 2008

Lima (Agencia Fides) - “El Adviento nos invita a mirar con fe y esperanza la venida del Salvador Jesucristo que nos abre a una nueva dimensión; que nos conduce a la conversión interior y exterior, a ser más hermanos, a la oración y a un esfuerzo sincero en la búsqueda de un Cristo Vivo encarnado en cada uno de nosotros”, afirman los Obispos de Perú en un Mensaje de Adviento dirigido a todos los fieles que lleva por titulo
Los Obispos recuerdan en primer lugar la experiencia de solidaridad vivida hace algunos días entre los Líderes de la Economía Asia-Pacífico “que nos alienta y se manifiesta en diversos acuerdos de cooperación mutua e intercambio comercial en pro del bienestar de nuestros pueblos”. También se perciben algunos signos de esperanza “por el crecimiento macroeconómico y las nuevas oportunidades de desarrollo que se abren al Perú”. Sin embargo a pesar de estos signos, los Obispos afirman que continúan existiendo algunos graves problemas como son: la injusticia social, la inestabilidad económica, la enorme desigualdad entre las personas y los pueblos, el flagelo de la corrupción, la violencia social y política en todas sus manifestaciones y expresiones.
En concreto, respecto a la corrupción consideran que “genera en la sociedad una desconfianza sistemática frente a las instituciones estatales y públicas”. Por ello alientan la iniciativa del Gobierno de un Plan integral contra la corrupción, tanto en su aspecto preventivo, como punitivo.
Como Pastores de la Iglesia muestran también su fuerte preocupación por “la inmoralidad reinante que corrompe conciencias, conductas y degrada los valores fundamentales de la vida, del matrimonio y la familia”. Ante esta urgencia invocan, especialmente la actitud profesional y responsable de los Medios de Comunicación Social, “cuya labor debe estar siempre inspirada y sostenida por criterios firmes y éticos, sobre todo por el respeto a la persona, a los valores permanentes que sustentan a la familia y por el amor a la verdad”.
Precisamente “el Adviento es un buen momento para la conversión, el perdón y la reconciliación que todos debemos poner en práctica para una convivencia fraterna”. Por ello los Obispos realizan un llamamiento a las autoridades, a todos los sectores de la sociedad, a todos los hombres y mujeres de buena voluntad “para que juntos asumamos responsable y solidariamente la parte que nos toca en la tarea de pacificar y construir un Perú más justo y solidario que garantice una vida digna a todos los peruanos, incluidos los más necesitados”. (RG) (Agencia Fides 3/12/2008)


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