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San Bernardo (Agencia Fides) - El Obispo de San Bernardo (Chile) , Mons. Juan Ignacio González, ha publicado una declaración sobre algunos criterios para votar en conciencia y ayudar a los católicos y a todos los creyentes a formar su criterio a la hora de emitir su voto en las próximas elecciones municipales.
En primer lugar el Obispo hace referencia a las palabras que cuatro años atrás ofrecía el Comité Permanente de la Conferencia Episcopal antes las elecciones, cuando recordaban a todos los católicos que “la participación en los procesos democráticos es un derecho y un deber de solidaridad con el bien común”. Y por otro lado las palabras del Santo Padre, Benedicto XVI en mayo del año 2007 quien recordaba que “si la Iglesia comenzara a transformarse directamente en sujeto político… perdería su independencia y su autoridad moral. La Iglesia es abogada de la justicia y de los pobres precisamente al no identificarse con los políticos ni con los intereses de partido. Sólo siendo independiente puede enseñar los grandes criterios y los valores inderogables, orientar las conciencias y ofrecer una opción de vida que va más allá del ámbito político” .
A partir de estas dos ideas fundamentales, el Obispo ofrece algunos criterios fundamentales para iluminar la conciencia personal de los creyentes. Estos a la hora de decidir aquel que quieren que les represente como alcalde y concejal deberían tener en cuenta algunos puntos que señala el Obispo según las enseñanzas del Cardenal vietnamita Francisco Javier Nguyên Van Thuân, en su libro “Bienaventuranzas del Político”: que refleje credibilidad, que trabaje por el bien común y no por su propio interés, que se mantenga fielmente coherente con una coherencia constante entre su fe y su vida, que realice la unidad, que sepa escuchar al pueblo, antes, durante y después de las elecciones, que sepa escuchar la propia conciencia y sepa escuchar a Dios, que no tenga miedo ante todo de la verdad.
Además Mons. Juan Ignacio también afirma que a la hora de votar se debe tener en cuenta en primer lugar el respeto a la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural. En particular recuerda el uso y distribución de la llamada píldora del día después, tema muy controvertido en el país en los últimos años. El Obispo afirma que su uso “es contrario a la dignidad de la persona humana y puede destruir la vida del que ya ha sido concebido” y, por tanto, “los católicos deben conocer cual es la opinión de los candidatos a este respecto”.
“Asimismo – continua el Obispos - un católico no debe dar su apoyo a candidatos que no respete la dignidad de la persona humana, como serian los que defienden o promueven las uniones homosexuales o lesbianas, los anticonceptivos físicos o químicos, o pretenden equiparar el matrimonio legal con las uniones de hecho”.
En tercer lugar según el Obispo, un católico “debe dar su voto a candidatos que respete el derecho primario de todo hombre o mujer a practicar, en privado o en publico, individualmente o en grupo, sus creencias religiosa y que no obstaculice, de cualquier manera, la enseñanza de la religión, prohíba las manifestaciones publicas de fe o se oponga a la instalación sin razón a la existencia de los lugares para dar culto a Dios, que pida la comunidad”. Es importante además saber si los candidatos “están dispuestos a favorecer las clases de religión católica para los padres que los deseen”.
Un católico, continua iluminando el Prelado, debería votar a un candidato que demuestre espíritu de servicio a los demás, con especial preferencia hacia los más pobres, que se no opongan al derecho de los padres a escoger el tipo de educación que, de acuerdo a sus convicciones, quieran para sus hijos, que “garanticen, con certeza moral, que utilizará honestamente los dineros y bienes públicos”; “que se comprometan a promover la dignidad de la familia fundada sobre el matrimonio entre un hombre y una mujer a combatir la violencia, la drogadicción, la injusticia institucionalizada, la corrupción pública y que haga propuestas creíbles en favor de los más necesitados”. Además debe saber escuchar, ser hombre de verdad, llevar una vida sobria y tener cualidades de gobierno.
“Pido a todos meditar en estas consideraciones, teniendo muy presente que cada uno, sólo ante Dios y su conciencia, debe decidir el nombre de las personas que crea mejor capacitas para el gobierno de nuestros municipios”. (RG) (Agencia Fides 15/10/2008
