ASIA/INDIA - La Iglesia se alegra por la primera santa india: Sor Alfonsa de la Inmaculada Concepción

viernes, 10 octubre 2008

New Delhi (Agencia Fides) – Incluso en un momento de sufrimiento, la Iglesia de la India tiene un motivo de gran alegría: la proclamación de la primera santa india en la historia de la Iglesia. Se trata de Sor Alfonsa de la Inmaculada Concepción (al siglo Anna Muttathupadathu), de las Clarisas del Tercer Orden de San Francisco. La celebración de la Canonización, presidida por Benedicto XVI, se realizará en el Vaticano el 12 de octubre, junto con la suiza Maria Bernarda Bütler, la ecuatoriana Narcisa de Jesús Martillo Morán y el sacerdote italiano Gaetano Errico.
Una nutrida delegación de la Iglesia india estará presente, junto con cientos de fieles llefaos de India para participar al histórico evento.
Anna nació en Arpukara, en la Arquidiócesis de Changanacherry (Estado de Kerala, en India meridional), el 19 de agosto de 1910 y fue bautizada según el rito siro-malabar. Huérfana en tierna edad, fue educada por una tía materna y por su abuela. Tempranamente se sintió atraída por la vida religiosa, siguiendo el ejemplo de Santa Teresa de Lisieux. A los 17 años, en 1927, entró en el monasterio de las Franciscanas Clarisas de Bharananganam recibiendo el nombre de Alfonsa. En 1931 emitió los votos temporales y en 1936 los perpetuos.
Le fue confiada la tarea de enseñar, pero debió dejarlo por motivos de salud. Consciente de la situación, se mostró muy reservada y caritativa hacia todos. Sufrió en silencio tanto las hostilidades que no le faltaron, como las enfermedades que en 1945 estallaron en modo violento, llevándola a la muerte a sólo 36 años, el 28 de julio de 1946.
En su sufrimiento decía: “Siento que el Señor me ha destinado a ser una oblación, un sacrificio de sufrimiento. El día en que no he sufrido es un día perdido para mí”. Su breve vida de hermana clarisa dejó el recuerdo de una santa existencia, que se propagó después de su muerte.
Numerosos peregrinos cada año se dirigen a su tumba para rezar y pedir gracias: no sólo fieles católicos, sino también musulmanes e hinduistas, atraídos por la pureza de su joven vida tan sufrida.
El Obispo de Palai en 1955 inició el proceso regular diocesano para su beatificación; el 9 de noviembre de 1984 fue declarada venerable y el 8 de febrero de 1986 el Papa Juan Pablo II la beatificó en Kottayam, en India.
“Su historia y su experiencia de dolor y sacrificio – nota la Iglesia india – es un ejemplo y un instrumento, en las dificultades del presente, para el arraigo y la madurez de la fe cristiana en India”. (PA) (Agencia Fides 10/10/2008 líneas 30 palabras 432)


Compartir: