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Yangón (Agencia Fides) - “Ha sido una gran manifestación de fe popular, donde una vez más he podido constatar la genuina y profunda devoción eucarística y mariana de los fieles, venidos en gran número de todo el país, haciendo grandísimos sacrificios para poder dirigirse al Santuario Nacional Mariano, intitulado a la Virgen de Lourdes”. Es lo que cuenta a la Agencia Fides S. Exc. Mons. Salvatore Pennacchio, Delegado Apostólico en Myanmar, después de haber participado a la peregrinación nacional realizada por los fieles birmanos al Santuario de Nyaunglebnin. “Este año la peregrinación ha asumido un carácter especial por la coincidencia de las celebraciones jubilares de los 150 años de las apariciones de la Virgen de Lourdes. Se puede decir que los dos Santuarios - Lourdes y Nyaunglebin - están unidos a distancia con un fuerte vínculo espiritual que refuerza la devoción mariana”, explicó Mons. Pennacchio.
Las celebraciones, a las que han participado en total más de 50 mil fieles, han representado un momento de gran alegría y de fuerte testimonio para la comunidad católica en Myanmar. Se conmemoró la fundación del Santuario iniciado hace 106 años por obra de los misioneros de las Misiones Extranjeras de París (MEP), y al mismo tiempo la Iglesia ha recibido un gran signo de esperanza en la ordenación contemporánea de seis nuevos sacerdotes que estarán al servicio pastoral de la comunidad en la Arquidiócesis de Yangón. La solemne Eucaristía con la Ordenación, que se realizó la mañana del 9 de febrero, abrió la jornada: participaron miles de fieles venidos de todo el país para expresar su profunda devoción mariana. Presidió la celebración Mons. Pennacchio, y entre los concelebrantes estuvieron Mons. Charles Maung Bo, Arzobispo de Yangón y otros Obispos de Myanmar.
Mons. Pennacchio invitó a los nuevos sacerdotes a ser “mensajeros de paz y de amor”, a proclamar la Buena nueva del amor de Dios, a comportarse con el pueblo tomando el ejemplo del “buen Samaritano”. El Delegado Apostólico recordó asimismo la importancia de la peregrinación en la vida del sacerdote.
En la tarde se realizó la solemne procesión mariana por las calles de la ciudad, guiada por el Arzobispo Bo, con todos los demás Obispos, los sacerdotes, los religiosos y más de 30 mil fieles laicos que han rezado con las palabras del Rosario y entonado cantos marianos. La población del lugar, en su mayoría budista, acogió con gran honor y respeto la intensa manifestación de fe de la comunidad católica.
A las 10 y 30 de la noche la jornada se concluyó con la Santa Misa en honor de Nuestra Señora de Lourdes, presidida por Mons. Paul Zightung, Arzobispo de Mandalay. En la homilía, pronunciada por Mons. Bo, el Arzobispo exhortó a confiar en la Providencia de Dios, a no desalentarse por las condiciones de pobreza y por las dificultades que el pueblo vive cada día, y a rezar pidiendo la intercesión de María. (PA) (Agencia Fides 13/2/2008 líneas 32 palabras 490)
