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Kinshasa (Agencia Fides) - Los Obispos congoleses dirigieron al país “un fuerte llamado al compromiso nacional y al cambio de mentalidad” a través de un mensaje del Comité permanente de la Conferencia Episcopal del a República Democrática del Congo. El mensaje con el título “Cambiemos nuestros corazones” ha sido enviado a la Agencia Fides.
“Está en juego el futuro de nuestro país, no podemos quedarnos callados”, afirman los Obispos al tiempo que precisan: “lejos de ser un simple grito de alarma para asustarnos los unos a los otros, nuestro llamado quiere ser un mensaje de esperanza para afrontar nuestro penoso presente y proyectar el futuro con optimismo, realismo, lucidez y responsabilidad”.
Aun año de la formación de las nuevas instituciones nacidas de las elecciones de diciembre del 2006, la Conferencia Episcopal congolesa nota que el “país parece estar arrastrando el paso a causa de la grave crisis relativa a la cuestión de la paz y de la justicia, de las exigencias éticas en la gestión pública, en lugar de ser impulsado por un liderazgo visionario y dinámica capaz de hacer frente a los diversos desafíos de la nación”.
Entre los retos los Obispo señalan el malestar social, representado en la huelga de profesores y funcionarios públicos, la formación de los jóvenes, muchos de los cuales viven en la calle, las cuestiones de la seguridad y de la paz, que están estrechamente ligadas al tema de la explotación de los recursos naturales congoleses. “Los conflictos de interés de los grupos económicos, eventualmente sostenidos por sus Estados, debido a la explotación de los recursos naturales de la RDC, ¿no constituyen una de las razones de la inseguridad en el territorio?” se preguntan los Obispos. “La explotación de los recursos naturales no resultan ser una solución para los graves problemas en la soberanía, la justicia, la legalidad y el respeto a las poblaciones y al ambiente” continúa el documento. “Apoyemos el proceso de revisión de los contratos injustos y exijamos a los gobiernos extranjeros y a las instituciones financieras internacionales el respeto por este proceso. Pidamos a nuestro gobierno que haga claro y transparente el cuadro jurídico de la estipulación de los contratos mineros y forestales. Las impresas mineras y forestales deben respetar las obligaciones en materia social y ambiental”.
El reto lanzado por la Iglesia católica puede ser superado sólo con un “cambio de corazón y de mentalidad. La Iglesia se compromete a contribuir en este campo con una reflexión pastoral que ilumine la puesta en marcha de una comisión de pacificación, reconciliación y reconstrucción comunitaria”. (L.M.) (Agencia Fides 13/2/2008; líneas 33, palabras 439)
