AMERICA/BOLIVIA - El hambre no tiene religión; órdenes religiosas y asociaciones laicas de las Iglesia Católica prevén quitar el hambre a niños y adultos

La Paz (Agencia Fides) - Aproximadamente 300 personas en toda la ciudad de Cochabamba trabajan en los comedores, sostenidos por diversos órdenes religiosos y asociaciones de laicos de la Iglesia Católica, de grupos de voluntarios y de la Prefectura. Más de 20 mil personas que viven en condiciones de extrema pobreza encuentran allí un plato de comida.
Los comedores, además de proveer la alimentación de los niños pobres, disponen de educadores que ayudan los chicos en sus tareas escolares. Algunos enseñan también a cocinar a sus madres para que tengan un trabajo vendiendo comida.
En el distrito de Oruro, Bolivia, 32 voluntarios sostienen el comedor infantil de Cala-Cala, gracias a las donaciones locales y extranjeras. Si bien el grupo es católico todos los componentes sostienen que el hambre no tiene religión”, consecuentemente no discriminan ningún niño que necesite o que sea pobre.
La Iglesia Católica es la que administra la mayor cantidad de comedores, con 73 centros donde comen alrededor de 15 mil pobres al día, entre los cuales niños y ancianos. Según la Secretaría de la Comisión para la Promoción Social del Arzobispado, Neva Moya, los entes administrativos de la Iglesia comprenden 30 comedores, 15 centros para el apoyo escolar y 28 internados rurales.
“Los niños entran por la mañana, hacen los deberes, almuerzan y luego van a la escuela” dijo la funcionaria del Arzobispado, todos los comedores reciben ayudas externas que luego son distribuidas por las congregaciones católicas.
El Servicio del Distrito para la Gestión Social (Sedeges) tiene cuatro comedores populares donde trabajan expertos en nutrición y salud, encargados de elaborar un menú idóneo para frenar la desnutrición . En cada uno de estos comedores comen 120 niños entre los seis y doce años.
Los Comedores más grandes son aquellos de la zona de San Carlos, administrados por la homónima parroquia. El segundo comedor más grande es el de la parroquia de Lazalet, que comprende cuatro comedores juntos y acoge niños y ancianos. También las mujeres voluntarias de Cala-Cala administran un comedor popular que financian con recursos de amigos de Cochabamba y extranjeros, asisten 210 niños y está en el viejo edificio de la parroquia. (AP) (20/6/2007 Agencia Fides; Líneas: 32 Palabras: 380)