ASIA/AFGANISTAN - El Ministro de la Educación, Mohmmad Hanif Atmar, reiteró la importancia del aporte y de la obra de los Jesuitas para el desarrollo de la escolarización en el país

miércoles, 20 junio 2007

Herat (Agencia Fides).- El ministro de la Educación de Afganistán, Mohmmad Hanif Armar, reiteró durante la inauguración de la Escuela Profesional de Herat, la importancia del aporte del Servicio Jesuita para los Refugiados (JRS) para el desarrollo de la alfabetización y de la escolarización en el País. Según SAR News, entre los dignatarios presentes en la ceremonia estuvieron presentes el Ministro de Comercio, A. Farhang, el Ministro de las obras y la Construcción, M. Yousuf Pashtoon, el Gobernador de Herat, Najibullah Omar Chill, y el Director de Educación en Kabul, Syed Hussein Anwarii.
Los Jesuitas empezaron a ocuparse de la escuela cuando había solamente 67 estudiantes. Actualmente hay 490 presencias, de las cuales 120 son chicas. El jesuita Fratel Noel, de la Provincia jesuita de Pune, y el Padre A. Saniamo, de la Provincia jesuita de Andhra, se esforzaron para obtener la ayuda de amigos y benefactores de Alemania, Suiza y Austria para lograr los servicios e infraestructuras adecuadas para los estudiantes y para las prácticas de laboratorio. El Ministro sugirió además a los Jesuitas transformar la escuela en un instituto autónomo, para consentir a los estudiantes, una vez terminados los estudios, participar de dos años de formación y de orientación al trabajo.
La escolarización y la alfabetización en Afganistán son fundamentales para el crecimiento de todo el País. En los últimos años la situación mejoró: entre el 2002 y el 2004 alrededor de 4,2 millones de niños comenzaron ir a las escuelas afganas. Los estudiantes aumentaron del 4% desde la caída del régimen talibán. Sobre todo la inscripción de las chicas pasa del 3% estimado antes del 2002 al 30% de todos los estudiantes inscriptos en el 2003. También el número de los docentes creció contando actualmente con aproximadamente cien mil profesionales, relativamente bajo si se lo compara con la tasa de aumento del aumento de los alumnos y del número de clases. Asimismo las tareas profesionales de los docentes son limitadas y falta totalmente la presencia de personal femenino. Menos del 15% de los profesores consiguieron una formación específica.
Es necesario recordar que aproximadamente 6.780 escuelas fueron arruinadas o completamente destruidas durante el conflicto, hoy dispuestas en carpas o al aire libre; 1.753 edificios escolares fueron restaurados o reconstruidos, aún faltaría por restaurar al menos 5.774 en los próximos 3 años, además de iniciar todos los servicios y las infraestructuras adecuadas.
Los niños de las aldeas más lejanas, cuya educación se interrumpió al inicio del conflicto, los niños con necesidades particulares, los refugiados regresados al País, las minorías étnicas y lingüísticas, las pequeñas comunidades de nómades como los Kutchis, están en riesgo nuevamente de quedar marginados de las actividades escolares. Por eso se necesitan escuelas profesionales para la instrucción de personas que superaron el tiempo del exilio. Se necesitan escuelas profesionales para la instrucción de personas que superaron la edad del desarrollo a través de cursos de cerámica, mecánica, carpintería, agricultura, economía. Solo el 28,7% de los afganos sabe leer y escribir. (K.P.) (Agencia Fides 20/6/2007 Líneas: 39 Palabras: 524)


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