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Melbourne (Agencia Fides) - El movimiento Amnesty International, comprometido universalmente en la defensa de los derechos humanos, podría registrar un flujo de dimisiones en masa, por parte de los adherentes católicos, sobre todo en las escuelas australianas, por haber cambiado la propia posición sobre el aborto: es cuanto afirma la Iglesia de Melbourne, donde el Vicario General, Mons. Les Tomlinson anunció que los Obispos australianos prontamente darán una respuesta completa y un documento, tras la decisión de Amnesty de sostener la despenalización del aborto.
A lo largo de la Conferencia nacional anual, en Edimburgo, alrededor de 400 miembros británicos de la Amnesty International expresaron con un voto la decisión de comprometerse en la despenalización del aborto, el acceso a los servicios de calidad para el tratamiento de complicaciones y la legalización, gratuidad y accesibilidad de la interrupción voluntaria del embarazo en caso de violación, incesto y riesgo para la vida de la mujer. El tema del aborto hace parte desde hace algunos años del debate interno de Amnesty sobre “derechos reproductivos”, sobre todo en relación al compromiso de la organización en regiones como Darfur, República democrática del Congo o Nigeria.
“Siempre ha habido simpatía entre Amnesty - organización fundada por el abogado católico Peter Benenson en 1961 - y los ideales de la Iglesia. “Por lo tanto, aquello que ha realizado Amnesty en relación al aborto, es un paso importante”, afirmó el Vicario. En el pasado la organización había mantenido neutralidad sobre el tema del aborto, considerándolo “una cuestión de decisión individual”.
La Iglesia resalta que Amnesty International perderá credibilidad como movimiento que defiende los derechos humanos, de sostener la legalización del aborto. También la obra de derecho pontificio “Ayuda a la Iglesia que sufre” afirmó: “Con gran disgusto hemos recibido la noticia que Amnesty ha propuesto favorecer los derechos del aborto en todo el mundo como su nueva misión”, explicando que se trata de una traición del “verdadero humanismo”, que defiende la vida desde su concepción hasta su fin natural. (PA) (Agencia Fides 31/5/2007 líneas 29 palabras 343)
