AFRICA/KENYA - Una flor en el desierto: la escuela para chicas de las Franciscanas Misioneras de Maria en el Noroeste de Kenia, entre los Turkana

miércoles, 21 marzo 2007

Nairobi (Agencia Fides) - la condición de la mujer con frecuencia difícil, lo es con mayor razón en regiones dónde las condiciones ambientales son extremas, como en el caso del Noroeste de Kenia, donde viven los Turkana, una población nómada que se está haciendo progresivamente sedentaria, en perenne lucha contra la sequía, la carestía y el robo de ganado.
En esta tierra inhospitalaria trabaja desde 1991 el "Turkana Homecraft Centre", un centro educativo para chicas administradas desde el 2001 por las Franciscanas Misioneras de Maria que lo han rebautizado como "St. Clare Homecraft Centre". El objetivo del centro es ofrecer una educación a las jóvenes para permitirles que encuentren un empleo y una fuente de ingresos. Entre las enseñanzas ofrecidas hay cursos de costura, de cocina, de economía doméstica, de asistencia a los niños, además de estudios de carácter social y religioso. Los cursos, de 2 años de duración, tienen el objetivo de formar a las jóvenes comprometidas y capaces, con sólidos valores humanos y cristianos.
Desde el 2002 al 2005, se han diplomado 76 chicas. Unas treinta han sido invitadas a seguir un curso suplementario para profundizar sus capacidades en micro finanzas y ver como proceden sus proyectos para llegar a ser autosuficientes. El curso de perfeccionamiento está basado en técnicas de mercadotecnia, gestión contable y principios básicos de crédito y ahorro. Entre las estudiantes que trabajan en el curso de perfeccionamiento, 13 están en parroquias y organizaciones católicas, 10 son trabajadoras autónomas y 8 está en espera de los resultados de sus entrevistas de trabajo.
La condición de la mujer en la región es muy difícil: trabajos pesados, embarazos prematuros, penuria de comida y agua. Los escasos recursos de la región son compartidos entre un número creciente de personas. A principios de los años 60 la población de la región contaba con 70.000 habitantes, ahora son medio millón, con ganado cada vez más escaso, diezmado por la sequía. (L.M) (Agencia Fides 21/3/2007 Líneas: 27 Palabras: 344)


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