AMERICA/BOLIVIA - “Que todos se sientan comprometidos a ser trabajadores incansables en favor de la paz y valientes defensores de la dignidad de la persona humana y de sus derechos inalienables”: Mensaje de los Obispos al inicio del Nuevo Año

lunes, 8 enero 2007

La Paz (Agencia Fides) - La Conferencia Episcopal de Bolivia ha enviado un Mensaje a todo el pueblo boliviano al inicio del Año Nuevo 2007, firmando por Mons. Jesús Juárez P. Obispo de la Diócesis de El Alto y Secretario General de la Conferencia Episcopal Boliviana, tomando como punto de reflexión el Mensaje del Santo Padre con motivo de la Jornada Mundial de la Paz
“La ocasión y el tema que propone el Papa - se lee al inicio del Mensaje - no podrían ser más oportunos para nuestro pueblo boliviano que experimenta preocupantes amenazas de enfrentamiento y división, originadas en visiones diferentes de país y alentadas por intereses políticos y económicos que se imponen al necesario y prioritario bienestar común”.
Continúan los Obispos recordando que el Santo Padre pone a la persona humana, con su dignidad y derechos fundamentales, en el corazón del anhelo de la paz y la unidad y como no podrá haber paz si se pasan por alto los derechos de todos y de cada uno. Es también la intención del Santo Padre “que todos dirijamos nuestra mirada hacia los niños, en tantos casos víctimas inocentes de la violencia, la explotación y maldad de adultos sin escrúpulos”.
A continuación recuerdan los Obispos de Bolivia que han denunciado en varias ocasiones “las contradicciones que vivimos los bolivianos y que impiden nuestra realización en unidad”. “Todos queremos la paz - continua el Mensaje - pero no se ponen los medios adecuados para alcanzarla; todos reclamamos el diálogo, pero permanecemos distanciados en la sociedad; todos decimos buscar la unidad, pero nos atrincheramos en posturas intransigentes”. Por ello la Iglesia siempre recuerda que “la paz es un don de Dios y que es responsabilidad y tarea de todos construirla”. Ante esta situación los Obispos desean que esta celebración constituya una oportunidad para “reafirmarnos en el valor de la libertad de los hijos de Dios... para afianzarnos en la verdad... comprometernos en vivir y practicar cotidianamente la justicia ... y acoger y vivir el don del amor que es la fuerza que transforma a las personas y al mundo”.
Concluyen los Obispos su Mensaje al inicio del nuevo año expresando “sus mejores deseos de bienestar y realización familiar y comunitaria para todos” y su felicitación “por los perseverantes esfuerzos para salir adelante y forjar su futuro, en medio de grandes limitaciones económicas y de realización cultural y espiritual”. Al mismo tiempo realizan un llamamiento a todas las personas de buena voluntad para que “todos se sientan comprometidos a ser trabajadores incansables en favor de la paz y valientes defensores de la dignidad de la persona humana y de sus derechos inalienables”. (RG) (Agencia Fides 8/1/2007 Líneas: 33 Palabras: 477)


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