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Banjul (Agencia Fides) - Sudán, Somalia y el destino del ex-Presidente del Chad Hissène Habré han sido el centro del último encuentro de la Unión Africana (UA) que se concluyó ayer, domingo 2 de julio, en Banjul, capital de Gambia.
La decisión más relevante tomada por los jefes de Estado y de gobierno africanos es la de prolongar la misión militar de la Unión Africana en el Darfur hasta finales de 2006. “Acogiendo la petición del Secretario General de las Naciones Unidas, la Unión Africana continuará desarrollando su misión hasta finales de año” anunció Denis Sassou Nguesso, Jefe del Estado del Congo (Congo Brazzaville) y Presidente a turno de la Unión Africana. La prolongación de la misión de la UA debería permitir que las Naciones Unidas se organizaran para poder reemplazar a las tropas africanas antes de comienzos del próximo año.
La misión de la UA en la atormentada región sudanesa, debía terminar antes de finales de septiembre de este año. Darfur es, desde febrero de 2003, teatro de un sangriento conflicto civil que ha provocado al menos 300.000 muertos y más de dos millones de refugiados internos prófugos en el limítrofe Chad. La misión de los 7.000 soldados africanos consiste en proteger a la delegación de observadores civiles que deben verificar el respeto de la tregua entre las partes. El territorio de Darfur es sin embargo tan inmenso que 7.000 militares y unos pocos miles de observadores no son suficientes para tener bajo control toda la zona. Por este motivo las Naciones Unidas, apoyadas por los Estados Unidos, tienen intención de enviar un contingente militar más robusto, dotado de medios adecuados para el control de este vasto territorio.
El summit de la UA afrontó también la cuestión de Somalia, tras la toma del poder por parte de las denominadas Cortes Islámicas. El Presidente Sassou Nguesso definió la situación somalí como “una tragedia”, mientras que el vértice de la UA expresó su apoyo al envío de una fuerza de paz regional bajo la protección de la IGAD (Asociación de los Estados de África Oriental). “Hemos decidido que la Unión Africana, junto a grupos regionales como la IGAD, deben hacerse con la situación somalí. La Unión Africana dará su apoyo al gobierno provisional de Somalia mientras invita a la comunidad internacional a unirse a nosotros para sostenerlo y, al mismo tiempo, a favorecer el diálogo con Somalia”, dijo el Presidente de la UA.
La UA ha tomado también una difícil decisión en relación con el ex-dictador del Chad Hisséne Habré, desde hace años exiliado en el Senegal, acusado de crímenes contra la humanidad cometidos durante los años de su presidencia (1982-1990). Habré es buscado por la justicia de Bélgica (País cuya legislación permite perseguir crímenes de la humanidad cometidos en cualquier parte del mundo), que ha pedido a Senegal su extradición. “Consideramos que estamos en condiciones mejores para juzgarlo y creo que no debemos rehuir nuestra responsabilidad”, dijo el Presidente de Senegal, Abdoulaye Wade, anunciando que Habré será procesado por la justicia de su país. (LM) (Agencia Fides 3/7/2006 Líneas: 40 Palabras: 532)
