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Kabul (Agencia Fides) - Amenaza de hambre en Afganistán. Más de 3,5 millones de afganos, para sobrevivir, depender de las raciones de alimento distribuidas por el programa Alimentario Munidial (PAM) de la ONU. Por falta de fondos , la Organización de las Naciones Unidas amenaza con no poder hacer frente a los compromisos por más tiempo.
En particular, se corre el riesgo de tener que interrumpir la ración de alimento de los niños en las escuelas, ofrecido como incentivo para su retorno a las aulas. Por eso el PAM hace un llamamiento para recoger 52 toneladas de alimento, equivalentes a 40 millones de dólares, necesarios para alejar el hambre de la población afgana que se encuentra en condiciones de extrema necesidad al menos hasta el mes de diciembre. “La falta de recursos no nos deja posibilidad de elección: nos veremos obligados a recortar las raciones de alimento y nuestras actividades si no recibimos nuevas ayudas”, declaró el enviado del PAM, Charles Vincent.
El problema del hambre se añade al de un país todavía no pacificado y normalizado, tras las elecciones políticas del 2005.
La pobreza va unida al antiguo problema de los prófugos, que existe hace decenios. La Alta Comisaría de las Naciones Unidas para los Refugiados permitió en el 2005 a más de 400.000 refugiados afganos regresar a su patria desde Pakistán e Irán. Estos tratan de inserirse en el tejido social de su país natal, del que huyeron a causa de la guerra, pero se encuentran con una situación de inseguridad, desocupación, bajas perspectivas de desarrollo... Todo lo cual no hace sino generar más pobreza.
Desde que se inició el programa de repatriación del Acnur - en el 2002, tras la caída del régimen de los talibanes - unos 2,9 millones de afganos han regresado desde Pakistán y 1,3 millones desde Irán.
También la Iglesia en Afganistán está tratando de contribuir en la reconstrucción del país, continuando su compromiso en obras de caridad y solidaridad. La pequeña comunidad católica en el país está dirigida por el Barnabita Padre Giuseppe Moretti, Superior de la Misiio sui Iuris. Los hermanos Barnabitas de más de 70 años atienden pastoralmente a la comunidad católica de Afganistán. La comunidad católica dirige proyectos de asistencia humanitaria, servicios sociales para los niños, proyectos de desarrollo. Entre otras, la Congregación religiosa de las Misioneras de la Caridad (las hermanas de Madre Teresa) ha pedido poder implantar una comunidad en Kabul. (Agencia Fides 5/5/2006 Líneas: 33 Palabras: 431)
