Pourcine Pic-Macaya (Agencia Fides) – «Han comenzado de nuevo los trabajos de mantenimiento de los senderos y caminos del territorio parroquial. En un momento del año en el que el trabajo en el campo disminuye, un pequeño salario resulta muy útil y da ánimo a mucha gente. Las dos vías principales que conducen a los mercados de los productos agrícolas locales ahora son más transitables también con mulas. Y para nuestros alumnos, el camino hacia la escuela es además resulta más seguro».
Es el testimonio del padre Massimo Miraglio, misionero camiliano en Haití, que escribe desde la comunidad de Pourcine Pic-Macaya relatando la resiliencia que anima a toda la población en un contexto tan difícil como el de la isla caribeña.
«Antes del amanecer –prosigue el misionero, párroco de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro– al menos un centenar de muchachos, jóvenes, adultos y ancianos bajan al río para llevar, cada uno según sus posibilidades, un poco de arena con la que continuar la construcción de la pequeña casa destinada a acoger a los visitantes, para la hospitalidad de quienes vendrán a impulsar los proyectos comunitarios. Sin duda se trata de una hermosa iniciativa comunitaria –subraya el padre Massimo– en preparación del trabajo que nos espera en el futuro próximo para la construcción del ambulatorio» (véase Fides 3/12/2025).
El miércoles 17 de diciembre ha sido el último día de clases para los alumnos de la escuela parroquial de alfabetización. «Se reanudará, esperamos que con el mismo entusiasmo, el 7 de enero. Los exámenes han terminado y el sábado 20 hemos tenido la fiesta de Navidad, a la que todos han asistido. Tras la oración inicial y algunas palabras sobre el sentido de la Navidad, han comenzado los bailes, los cantos, las poesías… Desde los más pequeños hasta los mayores, en todos se percibe un gran deseo de mostrar lo que saben hacer. Un entusiasmo que nos hace albergar esperanza… volver a empezar desde los más pequeños para reconstruir una comunidad diferente. Al Niño Jesús le pedimos el don de la sabiduría para guiar bien a nuestros niños», concluye el camiliano.
La escuela cuenta con unos 230 alumnos y una quincena de docentes, distribuidos en varias clases repartidas por todo el territorio parroquial.
(AP) (Agencia Fides 22/12/2025)
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