ÁFRICA/KENIA - La peregrinación de esperanza y solidaridad de los niños misioneros de la diócesis de Kakamega.

Kakamega (Agencia Fides) - Ropa, comida, material para rezar, ayuda económica y sonrisas. Estos son los regalos que unos 30 niños pertenecientes a la Obra Pontificia de la Infancia Misionera de la diócesis de Kakamega, en Kenia, acompañados por sus animadores sacerdotes y religiosos, han llevado a sus compañeros de la diócesis de Lodwar, situada en una de las regiones menos desarrolladas del país y cuyo territorio comprende 33 comunidades parroquiales.
«Los niños ayudan a los niños», el lema de la Obra Pontificia de la Infancia Misionera, fundada por Mons. Charles de Forbin-Janson, ha sido el hilo conductor que «ha atravesado» no solo los cuatro intensos días de esta peregrinación, sino también toda la preparación que ha durado varios meses y durante la cual los niños y adolescentes se han esforzado por sensibilizar a todos en la recogida de ayudas destinadas a sus cohetáneos.
«La visita de estos niños ha sido un gran gesto de colaboración, de trabajo conjunto; representa concretamente el espíritu misionero y refuerza también lo que representa el movimiento, sobre todo ahora que los recursos externos se han reducido», afirma John Mbinda, obispo de la diócesis de Lodwar. «Los niños han dado un ejemplo muy importante, que debería ser emulado por otras diócesis y grupos de personas».
Haciéndose eco de las palabras del obispo, el director de las Obras Misionales Pontificias (OMP) de la diócesis de Lodwar ha descrito la contribución de los niños como una «gran bendición», subrayando la necesidad de colaboración entre las diócesis de los países africanos.
Durante su estancia en Lodwar, los niños se han comprometido activamente con la comunidad local. En la parroquia de Cristo Rey en Lokichar, han regalado a sus coetáneos rosarios, material de animación y alimentos. En la ciudad de Lodwar, el obispo ha celebrado la Santa Misa para los niños de ambas diócesis.
Los jóvenes misioneros también han visitado el Santuario de la Inmaculada Concepción, interactuando con las familias y distribuyendo personalmente los objetos que habían traído.
El padre Godfrey Sechero, director diocesano de las OMP de Kakamega, que ha acompañado al grupo, ha querido destacar que los encuentros entre los dos grupos de niños han sido uno de los momentos más significativos de la peregrinación. «Queremos que los niños perciban que somos el mismo pueblo, un solo pueblo, aunque vivamos en zonas geográficas y condiciones climáticas diferentes», afirma el padre Sechero, quien además comenta que la peregrinación ha reavivado la fe y el espíritu misionero de los niños que han participado en ella.
(EG) (Agencia Fides 13/12/2025)

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