Quito (Agencia Fides) - Once policías y 201 funcionarios de prisiones han sido liberados en Ecuador de siete cárceles del país donde habían sido tomados como rehenes por reclusos amotinados (véase Fides 12/1/2024).
Al menos en un caso, el de la cárcel masculina de Esmeraldas, la mediación de la Iglesia católica ha logrado obtener la liberación de los rehenes sin violencia. También en este caso, la prisión ha vuelto a estar bajo control gubernamental tras el despliegue de al menos mil soldados. Los agentes han registrado todas las celdas y han encontrado armas de fuego, explosivos, cuchillos, drogas y teléfonos móviles.
La situación se está normalizando en las principales ciudades del país, empezando por Quito y Guayaquil, escenario de enfrentamientos desatados por diversas bandas criminales (véase Fides 11/1/2024).
La acción conjunta de la policía y el ejército ha permitido recuperar el control de las cárceles y detener a 1.327 personas acusadas de la violencia de los últimos días. Desde que el 9 de enero se declaró el estado de guerra contra las bandas, las autoridades han llevado a cabo 12.974 operaciones en el marco del llamado Plan Féniz, en las que han muerto dos policías y cinco delincuentes.
En el mismo periodo se han producido diez atentados contra infraestructuras policiales y trece atentados contra infraestructuras públicas y privadas. El presidente Daniel Noboa pretende acabar con el control de las cárceles ecuatorianas por parte de grupos criminales. La estrategia de Noboa, además de recuperar el control interno de las cárceles, se basa en la construcción de dos mega cárceles al estilo de la construida por el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, con la separación de los jefes de sus “soldados”. Las dos cárceles de máxima seguridad se construirán en Pastaza (Amazonas) y en la zona costera de Santa Elena.
(L.M.) (Agencia Fides 15/1/2024)