AFRICA/UGANDA - "La Navidad de los niños del Norte de Uganda es parecida a la de Jesús niño que nada más nacer tuvo que huir a Egipto" dice un misionero

Gulu (Agencia Fides) - "Los niños del Norte Uganda viven la misma Navidad que el Niño Jesús que nada más nacer tuvo que huir a Egipto" dice un misionero del Norte de Uganda, donde la mayor parte de la población vive en campos de refugiados interiores, a causa de la guerrilla del LRA, (Ejercito de Resistencia del Señor).
“la Navidad es tradicionalmente una fiesta que se vive en familia pero aquí por desgracia, no es posible. Las chozas de los campos de refugiados son muy pequeñas, y los niños se ven obligados a dormir en centros de alojamiento externos. Se ha dicho que los pequeños se reúnen por la noche en estos centros por miedo a ser secuestrados por la guerrilla. Pero esto es solo verdad a medias, porque la causa principal de este fenómeno son las condiciones desastrosas de los campos de refugiados interiores" cuenta el misionero. "Hace tan sólo apenas unos pocos días, fueron destruidas 400 chozas de uno de estos campos, a causa de en incendio accidental. La gente vive amontonada unos encima de otros en condiciones higiénicas muy precarias."
"Es por lo tanto difícil ara los pequeños conseguir vivir la Navidad, su fiesta por excelencia, junto a los padres" continúa el misionero. "A pesar de esto, la comunidad cristiana vivirá en la Navidad realmente la llegada de Cristo. Estoy muy agradecido a los numerosos catequistas y laicos que trabajan en los campos de refugiados, para que se produzca la reconciliación y las personas puedan recobrar y conservar su dignidad."
"En mi parroquia hay 5 campos de refugiados interiores. Celebraré la Misa del Gallo en uno de estos y la mañana siguiente, en otro" dice el religioso. "Gracias a Dios la comunidad es fuerte en la fe. Se ha sembrado mucho pero también se ha recogido mucho. Tan sólo en un domingo he bautizado a 63 niños en un campo y a 45 en otro. Sin contar luego con los 126 adolescentes bautizados hace una semana aproximadamente".
"El regalo que piden los niños del Norte Uganda es que la comunidad internacional asuma sus propias responsabilidades respecto a ellos. No se trata sólo de llevar ayudas humanitarias, sino de dar la posibilidad a la población local de vivir en paz y seguridad para poder asegurar un futuro mejor a los hijos. El escándalo de los campos de refugiados tiene que acabar" afirma el religioso.
La guerrilla del LRA, desde hace unos 20 años revuelve la vida de las poblaciones del Norte de Uganda. Al menos un millón de personas se ven obligadas a vivir en los campos de refugiados interiores y más 35.000 niños han sido secuestrados para ser soldados. "Es triste que son muy pocos los guerrilleros respecto a la extensión del territorio que devastan. ¿No será posible poner fina alguna vez a esta tragedia? Pidamos para que el Niño Jesús nos traiga la paz" concluye el misionero. (L.M) (Agencia Fides 23/12/2005 Líneas: 35 Palabras: 511)