ASIA/COREA DEL SUR - “Vemos también con preocupación el sendero por el que Europa se está encaminando. La Iglesia debe reiterar de manera constructiva la importancia primaria de la familia”, dice a la Fides el Secretario de la Conferencia Episcopal de Corea, tras la aprobación del matrimonio entre homosexuales en España

viernes, 1 julio 2005

Seúl (Agencia Fides) - “Acabamos de recibir la noticia de la legalización de los matrimonios homosexuales en España. La noticia no se ha tenido gran relieve en Corea puesto que en nuestro contexto este problema no es muy agudo. Para nosotros la cuestión de mayor relevancia es, en cambio, la gradual crisis y disolución de los núcleos familiares y el aumento de los divorcios. A la Iglesia, en las diferentes naciones del mundo, le corresponde el deber de reafirmar constructivamente la importancia de la familia, célula base de toda sociedad”; con estas palabras Monseñor John Chang, Obispo de Chunchon y Secretario de la Conferencia Episcopal Coreana, ha comentado a la Agencia Fides la noticia de la aprobación de la ley sobre los matrimonios entre homosexuales en España.
El Obispo ha añadido: “No creo que en Corea, al menos durante los próximos años, se pudiera llegar a tanto. Pero también es verdad que estamos expuestos, por el fenómeno de la globalización de las culturas y de las tecnologías, a la contaminación cultural que procede de Europa y de los Estados Unidos.
“Actualmente, en Corea -prosigue diciendo Monseñor Chang- estamos muy preocupados por el Estado de Salud de la Institución de la familia, contaminada y destruida por una cultura individualista que corroe las bases mismas de la sociedad humana. Vemos también con preocupación el sendero por el que Europa se está encaminando”.
En cuanto a las soluciones, Monseñor Chang nota a la Fides: “Es preciso trabajar de manera constructiva, reafirmando el valor primordial de la auténtica familia. Se necesita, sobre todo, una atenta formación de los jóvenes, para que sepan asumirse sus responsabilidades, madurando una recta y seria conciencia. También cuenta la obra de los padres, que deberían impartir una correcta educación a sus hijos, transmitiéndoles valores sanos”.
(P.A.) (Agencia Fides 1/07/05)


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