ASIA/INDONESIA - Se agrava la situación de los evacuados internos de las Molucas: crecen la pobreza, malnutrición y enfermedades

jueves, 30 junio 2005

Ambon (Agencia Fides) - La situación de los evacuados internos en las islas Molucas, en la Indonesia oriental, se está deteriorando fuertemente. La malnutrición crece velozmente entre los niños y las condiciones higiénicas sanitarias son mínimas. En los campos de refugiados todavía existentes en los alrededores del capital Ambon, después de la guerra civil que ha afectó el archipiélago en los años 1999-2002, las condiciones de vida se han hecho cada vez más difíciles. Lo indica a la Agencia Fides el Centro de Crisis de la Diócesis de Amboina, recordando que en Ambon más de 60.000 personas viven por debajo del umbral de pobreza, triste herencia de los años de guerra civil.
El gobierno local trabaja por disminuir el número de barracas entregando nuevas viviendas a las familias de los evacuados que perdieron su casa durante la guerra civil. También la Iglesia católica y las otras Iglesias cristianas presentes en las Molucas trabajan por asignar fondos y sacar adelante proyectos para situar a los refugiados, como ocurre en el suburbio de Ahuru, en los alrededores de Ambon, dónde algunas familias han reconstruido su casa o están completándola. Pero mientras tanto, las condiciones de vida en los campos de refugiados, a tres años del final del conflicto civil, parecen agravarse, como se deduce de los más de 800 casos de malaria verificados.
Muchos de los ciudadanos malucos, que dejaron las islas como consecuencia de la guerra (en total más de 500.000) han regresado a su casa, con el restablecimiento de las condiciones de paz y seguridad. Pero no tienen un sitio dónde estar, puesto que muchas casas han sido destruidas, y, por ello, viven como desplazados su propia tierra. También están sin trabajo: en las islas se está reavivando gradualmente el curso de la economía y el mercado, después de que hubieran cesado numerosas actividades comerciales y artesanales en los años de la guerra. El número de personas que viven bajo el umbral de pobreza ha superado el 24%: esto significa que de los 250.000 ciudadanos de Ambon, al menos 60.000 personas están en grave estado de indigencia.
Esta situación preocupa mucho a las autoridades civiles, que siguen recibiendo ayudas financieras de las agencias de la ONU, dado que la pobreza y el malestar pueden ser precursores de nuevas tensiones sociales. También la Iglesia local se pregunta como poder ayudar en esta grave situación socio económico.
La diócesis de Amboina ha reafirmado su voluntad de contribuir al futuro de paz en el archipiélago, renovando su compromiso a nivel social y en la instrucción. (PA) (Agencia Fides 30/6/2005 Líneas: 32 Palabras: 441)


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