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Lisboa (Agencia Fides) - "Cada vez que la Iglesia se reúne para celebrar la Eucaristía, celebra su propio origen y acoge, con el mismo vigor con que Cristo lo entregó, el mandato de llevar el alegre mensaje a todas las naciones": afirma Mons. Manuel Neto Quintas, Obispo auxiliar de Faro y Presidente de la Comisión Episcopal de Misiones, en una reflexión titulada "Eucaristía y Misión, binomio inseparable", publicada en la página web de las OMP de Portugal.
Mons. Neto Quintas subraya que la comunión sacramental como expresión plena de participación en el sacrificio eucarístico, renuevan y consolida la incorporación a Cristo realizada en el Bautismo y envía de nuevo a todo cristiano y a toda la Iglesia, como signos e instrumentos de la salvación realizada por Cristo, a anunciar y testimoniar el Evangelio. "En la Eucaristía convergen la vida de la Iglesia y de todo cristiano, por medio de un continuo proceso de configuración a Cristo y en el ejercicio de su acción evangelizadora."
En esta perspectiva, "la Eucaristía constituye el medio por excelencia para lanzar, de modo audaz, la misión ad gentes, ya que ella es el manantial de donde nace todo impulso dinámico de la acción evangelizadora de la Iglesia: es el alimento con el que debe alimentarse todo cristiano para llevar a todos el amor de Dios revelado en plenitud en Cristo". Por tanto, no es posible edificar la comunidad cristiana si no tiene sus raíces y su centro en la Celebración de la Eucaristía. “La fuerza evangelizadora que nace de la Eucaristía, cuando esta es celebrada y vivida de forma adecuada, lleva al cristiano a un compromiso misionero en el entorno donde vivas y en otros ambientes". (R.Z) (Agencia Fides 29/10/2004; Líneas: 22 Palabras: 316)
