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Roma (Agencia Fides) - Decenas de miles de mujeres y jóvenes violadas al este de la República Democrática del Congo (RDC). Lo denuncia una relación de Amnistía Internacional dedicada a la situación congoleña, que forma parte de una campaña más amplia titulada “Detener la violencia contra las mujeres". En efecto, por desgracia, mujeres, jóvenes y hasta niñas son las primeras víctimas de la guerra en África como en otros partes del mundo. Pero los relatores de la relación afirman que no han encontrado nunca un número tan elevado de violaciones como en el caso del este de la RDC.
La relación subraya la necesidad de ofrecer tratamientos médicos adecuados a las víctimas y llama de nuevo al gobierno congoleño y a la comunidad internacional par que actúe con urgencia para ayudar a estas personas y detener las violencias. Amnistía Internacional considera como responsables de las violencias contra las mujeres a todas las fuerzas armadas regulares e irregulares que obran en la zona: ejércitos regulares de la RDC, Uganda, Rwanda y Burundi y los diversos movimientos de guerrilla congoleños, rwandeses y burundeses. También se han señalado, por desgracia, casos de violación por parte de miembros de la MONUC, la Misión de las Naciones Unidas en el Congo que debería garantizar el respeto de los acuerdos de paz al este del Congo.
La edad de las víctimas varía desde los 6 a los 70 años. Algunos de estas han sufrido asaltos sexuales de 20 hombres a la vez. Muchas mujeres son reducidas a esclavitud y son consideradas como "propiedad" del combatiente-dueño. La esclavitud puede durar incluso años.
La violación es usada deliberadamente como una estrategia para desestabilizar a la población civil y aseguras su control para el aniquilamiento psicológico y la sumisión. Madres de familia son violadas ante sus propios hijos u obligadas a tener relaciones con sus parientes.
La situación sanitaria está al colapso. El virus VIH se está difundiendo como el aceite al igual que otras enfermedades de transmisión sexual, sin contar los graves daños físicos y psicológicos que sufren las mujeres. Hasta ahora sólo algunas ONG y un puñado de médicos y enfermeros congoleños han ofrecido a las víctimas de las violaciones un apoyo médico y psicológico. El drama se ha acentuado por el hecho de que el sistema sanitario del este del Congo está destrozado: hospitales y dispensarios destruidos, faltan fármacos incluso los más comunes, no hay medios estériles ni agua limpia.
El drama dentro del drama es el las mujeres que se han quedado embarazadas y sus hijos son condenadas por la sociedad y empujados fuera de la misma. (L.M) (Agencia Fides 27/10/2004 Líneas: 32 Palabras: 446)
