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Tegucigalpa (Agencia Fides) – Quién desea salir de las pandillas delictivas en Honduras (véase Fides 06/06/2013) y decide cambiar su vida después de estar en prisión, es probable que sea asesinado por miembros de la banda adversaria. Casi todos los miembros de las bandas, de hecho, son reconocibles por los tatuajes que llevan. Los tatuajes, a menudo vistosos y difíciles de ocultar con la ropa, también son un problema para encontrar un empleo, inscribirse en un curso de estudios, o simplemente para frecuentar grupos de nuevos amigos.
Precisamente para mejorar esta situación, el personal del Programa Nacional de Prevención, Rehabilitación y Re-inserción Social (PNPRRS) ha organizado encuentros de formación para jóvenes que quieres realmente hacerse una vida nueva.
El programa del PNPRRS otorga asistencia médica para el des-tatuaje. La iniciativa se llama “Borrón y Vida Nueva”.
Según una nota enviada por el semanal Fides, gracias a la actividad del PNPRRS “muchísimos los jóvenes de ambos sexos han sido rescatados y que ya están siendo preparados para sus nuevas vidas”. Solo en el último mes unos 120 jóvenes se han servido de la ayuda del PNRRS. (CE) (Agencia Fides, 07/06/2013)
