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Seúl (Agencia Fides) - Son los que han fundado, derramando su sangre, la Iglesia en Corea: los mártires coreanos constituyen un patrimonio para la comunidad católica de la península, que recientemente les han dedicado numerosas celebraciones en muchas diócesis.
En la diócesis de Wonju se ha tenido un congreso sobre la historia de los mártires coreanos, en la que han participado más de 3.000 fieles, que han visitado también la tumba del P.Thomas Choi Yang-eop, segundo sacerdote coreano.
En la comunidad de Suwon, una Misa Solemne celebrada por Mons. Matthias Ri Iong-hun, Obispo Auxiliar, que ha reunido a más de 1.000 católicos, portando una pancarta de 20 metros con los nombres de 20 mártires escritos en ella. El Obispo ha dicho: "Igual que nuestros antepasados han dado su testimonio a Dios y respondido al amor de Dios, hasta dar la vida, también nosotros podemos responder a su amor."
En la diócesis de Andong, durante una celebración dedicada a los mártires, el Obispo Giovanni Crisostomo Kwon Hyok-ju pidió a los fieles que "renacieran como cristianos, siguiendo el espíritu de los mártires que tuvieron el valor de ofrecer su vida, esperando en Dios y en la vida eterna". Mons. Francisco Javier Ahn Myong-ok, Obispo de Masan ha subrayado que "siguiendo el espíritu de los mártires, podemos aprender a practicar el espíritu de sacrificio y caridad."
La Iglesia coreana ha abierto hace poco (en julio pasado) la fase diocesana de la Causa de Beatificación del Siervo de Dios Paul Yun Ji-chung y de sus 123 compañeros.
Mons. Michael Pak Jeong, será quien instruya el proceso junto con el P. Joseph Rhee Chan-woo, delegado episcopal y otros sacerdotes con funciones notariales.
Cada cuarto viernes del mes está dedicado a la investigación sobre la vida y santidad de los 124 mártires. En el 2002 la Iglesia local sometió a la Congregación para las Causas de los Santos la documentación relativa a los 124 mártires coreanos. En diciembre del 2003 la Santa Sede dio el visto bueno para el inicio del Proceso de Beatificación.
Paul Yun Ji-Chung y 123 mártires compañeros fueron torturados y asesinados in odium fidei en 1791, a los albores de la introducción del cristianismo en Corea.
Es importante señalar que la Iglesia de Corea ya venera a 103 mártires, que fueron canonizados en 1984 en Seúl por Juan Pablo II, en la primera ceremonia de canonización fuera del Vaticano: un acontecimiento memorable para la Iglesia coreana.
Además la Santa Sede también ha dado a la Iglesia de Corea la autorización para iniciar el proceso de otra Causa de Beatificación: la del Siervo de Dios p. Thomas Choe Yang-eop, sacerdote coreana que vivió en el siglo XIX (no es mártir), segundo sacerdote coreano, después del p. Andrew Kim Tae-gon, patrón del clero coreano. (PA) (Agencia Fides 8/10/2004 Líneas: 36 palabras: 482)
