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Manila (Agencia Fides) - Mucha fuerza y esperanza, a pesar de la necesidad de nuevas vocaciones: es el cuadro que emerge de los trabajos del primero Congreso del Clero filipino en curso en Manila de 5 al 9 de julio, que ha reunido a más de 3.900 sacerdotes y 100 Obispos de todo el país. El tema de la asamblea es "Un clero renovado, una Iglesia renovada, una nación renovada" extraído del pasaje de la Sagrada Escritura "Mirarán al que traspasaron" (Jn19,37).
En un mensaje enviado al Congreso, el Santo Padre exhorta a los sacerdotes a ser "amigos de Cristo". Esta amistad - escribe Juan Pablo II - nutrida con la oración y los Sacramentos, es la base para una auténtica renovación interior a todos los niveles, personal, social e institucional".
Actualmente, ha subrayado Mons. Luis Antonio Tagle, Obispo de Imus y jefe de la Comisión Episcopal para la Doctrina de la fe, los cerca de 9.000 sacerdotes presentes en Filipinas realizan un trabajo pastoral, teniendo que servir a más de 15.000 almas cada uno. El ideal, en cambio, sería un sacerdote para la atención de unos 2.000 fieles. Esta falta de vocaciones, subraya el Obispo en su intervención, no ha engendrado de todas formas una disminución de la fe en el pueblo filipino, pero amenaza con llevar al cierre de algunas parroquias.
Según el Obispo la disminución vocacional depende de muchos factores: los estrechos criterios de selección empleados en los seminarios; razones ambientales y culturales; también los escándalos que se han producido en los últimos años en la Iglesia filipina, que han contribuido a alejar a algunos seminaristas. Sobre este punto doloroso el Obispo ha subrayado que estos han servido en todo caso para mostrar que “el sacerdote es un hombre también”.
El Congreso se desarrolla después de que últimamente se hayan producido casos de sacerdotes implicados en relaciones con mujeres, o acusados de corrupción, que han sacudido a la comunidad católica y a los que los medios de comunicación han dado mucho relieve. Hechos que, subraya la asamblea, han dado un mal ejemplo a los fieles, sobre todo a los jóvenes.
Hablando a la asamblea, el Card. Ricardo Vidal, Arzobispo de Cebu, ha subrayado como el sacerdocio es "un don de Dios, que no se puede poseer como un adorno, sino que debe ser restituido al mismo Dios." (PA) (Agencia Fides 8/7/2004 Líneas: 29 Palabras: 409)
