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Manila (Agencia Fides) – “Rezar y trabajar por la paz y la transformación social” en vistas a las inminentes elecciones generales del 10 de mayo: es el llamamiento contenido en un comunicado que lleva el título “Transformar las elecciones a través de una solidaridad de las conciencias”, enviado a la Agencia Fides por la Conferencia Episcopal de las Filipinas, y firmado por el Presidente de la Conferencia, S. Exc. Mons. Nereo Ochimar.
Se trata del segundo mensaje que, en pocos días, es dirigido a los fieles y a la población filipina (ver Fides 28/4/2010 ) y esto, señalan fuentes de Fides en la Iglesia local, “es testimonio de la grandísima atención que la Iglesia pone en este momento, un paso determinante en la historia de la nación”.
La urgencia de “rezar y de trabajar por la paz y la transformación social” invita a todos – nota el texto – “a difundir moralidad y espiritualidad en la política y en el proceso electoral, a través del compromiso activo de los laicos en un trabajo imparcial, como ofrecer instrucciones a los votantes, y sobre el uso de los medios automáticos”. Dicha urgencia impone, asimismo, participar activamente en “círculos de discernimiento” y, por el trabajo de los hombres en uniforme, “asegurar y mantener la paz”.
Mons. Ochimar se muestra optimista, viendo en muchos, a pesar de las dificultades y los desafíos, la voluntad de trabajar, en todos los niveles, por la transparencia y la moralidad, afirmando que esto constituye “un rayo de esperanza para el país”.
El comunicado de los Obispos realiza un lúcido análisis de la situación, notando el persistente “patronazgo político”, las violaciones de la ley en campaña electoral, los casos de violencia, intimidación y compraventa de votos que se registran, o las voces que buscan “hacer callar las conciencias de los ciudadanos”.
Por otro lado, los Obispos alaban a los grupos de ciudadanos, las organizaciones, incluso los consejos parroquiales, que están haciendo lo posible para asegurar elecciones honestas, pacíficas y creíbles: un compromiso definido “esencial para garantizar paz y orden”. Está por un lado “el miedo”, y por otro lado la esperanza: esta última deriva “del surgir vigoroso de la democracia” y de la convicción difundida del hecho que “ser temerosos de Dios es una de las cualidades fundamentales para un buen liderazgo”.
“Los fieles – señala el texto – no están solamente comprometidos en garantizar elecciones creíbles”, sino que ayudan también a “discernir candidatos creíbles”. “Somos una nación que está aprendiendo a rezar y trabajar por la transformación social”.
El comunicado se cierra con un llamamiento: a los votantes para que “rechacen el mal y escuchen su conciencia”, iluminada por la enseñanza de la Iglesia; a la Comisión Electoral para que vigile en particular sobre el funcionamiento de los nuevos mecanismos automáticos en vigor en esta vuelta electoral; a los candidatos para que actúen con “probada integridad y con espíritu de servicio”, respetando plenamente la Constitución.
“Digámosle sí a nuestra conciencia, a la Constitución, a Cristo, comprometiéndonos en una política hecha de paciencia, humildad y paz”, concluyen los Obispos. (PA) (Agencia Fides 5/5/2010; líneas 38 palabras 506)
