ASIA/TAIWÁN - “Comienza una nueva era de evangelización, rememos mar adentro, convirtámonos en las manos y los pies de Cristo”: son los deseos del Obispo de Tai Chung en vistas de la clausura de los 150 años de la evangelización de Taiwán

Tai Chung (Agencia Fides) – “En este año de gracia” con el que se recuerdan los 150 años de la evangelización de la isla de Taiwán, “como podríamos olvidar y no agradecer a los misioneros extranjeros, sobre todo a los primeros... su total dedicación y el amor con el que han marcado nuestros corazones”. Esto nos tiene que impulsar a “remar mar adentro, a convertirnos en las manos y los pies de Cristo”. S.E.R. Mons. Martín Su Yao Wen, ordinario de la diócesis de Tai Chung, expresó con estas palabras sus sentimientos en vistas a la clausura de las celebraciones por los 150 años de la evangelización de Taiwán.
En vistas a esta importante celebración jubilar que se realizará el sábado 21 de noviembre, presidida por el Enviado especial del Papa, el Card. Jozef Tomko, el boletín semanal de la Arquidiócesis de Tai Pei presentó una serie de intervenciones de los Obispos taiwaneses. Haciendo referencia a la realidad diocesana, el Obispo de Tai Chung hizo un recorrido histórico de la evangelización iniciada en el lejano 1875 por los misioneros dominicos. “Frente a los 2000 años de la historia de la Iglesia evidentemente la nuestra, con 150 años, es muy breve, somos una Iglesia joven. Pero al mismo tiempo es un llamado a asumir con responsabilidad una evangelización continua, a llevar el Evangelio y el Amor de Cristo a todos los habitantes de Taiwán”. Por lo que afirmó el Obispo: “Creo que la celebración de la clausura en realidad será el inicio de una nueva era de evangelización, siempre y cuando rememos mar adentro y seamos las manos y los pies de Cristo”. (NZ) (Agencia Fides 18/11/2009 - líneas 20, palabras 313)