ASIA/NEPAL - “No dejaremos Nepal por las amenazas recibidas, la misión sigue adelante”, dice a Fides el pro-Vicario Apostólico

jueves, 16 julio 2009

Katmandú (Agencia Fides) – “Estamos preocupados y tememos que atentados como el de la iglesia de la Asunción (ver Fides 25/5/2009) puedan repetirse. Pero nosotros cristianos no nos dejaremos atemorizar y no abandonaremos el país. Nuestra misión sigue adelante. Ciertamente, vigilamos con mayor atención y prudencia. Y confiamos en Dios”: es lo que dice a la Agencia Fides el p. Pius Perumana, pro-Vicario Apostólico en Nepal, al día siguiente de las nuevas amenazas recibidas por la comunidad cristiana en el país.
En el coloquio con Fides, el P. Pius dibuja el cuadro de la situación para la comunidad católica en Nepal: “Las amenazas contra los cristianos crecen día a día. Muchas iglesias, escuelas e instituciones cristianas las han recibido y el Nepal Defence Army (NDA) parece tener las manos libres para difundirlas. Su líder, Ram Prasad Mainali goza de la protección de algunos líderes políticos y puede hacer de dueño en todo el país, pidiendo públicamente a los cristianos que cierren las actividades y abandonen el país. En mi opinión, falta la voluntad política para detener a estos integralistas. Algunos grupos y facciones políticas, que sostienen a la monarquía y desearían volver al antiguo sistema ven en el NDA un aliado precioso”.
El P. Pius continúa: “Las minorías religiosas en el país, musulmanes y cristianos, son penalizados fuertemente porque no tienen protecciones a nivel político y son, a nivel electoral, una minoría poco significativa. Las autoridades siguen prometiéndonos seguridad y libertad, pero nuestra confianza en los políticos está disminuyendo vistosamente. Algunas instituciones católicas han recibido reiteradas invitaciones a dejar el país en un mes, bajo pena de atentados. Lo mismo ha ocurrido con las iglesias cristianas protestantes. Pero el estado no hace nada. No tenemos los medios para defendernos de estas intimidaciones. Sería necesario aumentar la presión política, nacional e internacional, sobre el gobierno para inducirlo a la acción para detener a los extremistas. Nosotros podemos sólo confiar en Dios, el Señor de la historia. Es nuestro único consuelo. Hacemos lo que podemos, el resto está en las manos del Señor”. (PA) (Agencia Fides 16/07/2009 líneas 24 palabras 341)


Compartir: