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Brazzaville (Agencia Fides) – Como todos pronosticaron, el Presidente saliente Denis Sassou Nguesso venció en las elecciones presidenciales que se desarrollaron en la República del Congo el 12 de julio (ver Fides 10/7/2009)
Según los resultados publicados ayer, 15 de julio, Nguesso obtuvo 1’055,117 de los 1’342,242 votos expresados, equivalentes a un porcentaje del 78,61%.
El segundo lugar lo ocupó el candidato independientes Joseph Kignoumbi Kia Mboungou, con el 7,46% de los votos, seguido de Nicéphore Fylla de Saint-Eudes (6,98%) y por quien era considerado el principal adversario de Nguesso, su opositor Mathias Dzon, quien obtuvo sólo el 2,30% de los votos. Para que el resultado se haga efectivo, el Presidente debe ser proclamado por la Corte Constitucional, la cual debe primero analizar las eventuales contestaciones al voto.
Si bien los observadores internacionales han afirmado que las elecciones se han desarrollado de manera correcta, diversas organizaciones no gubernamentales locales y asociaciones de las sociedades civiles congolesas han expresado diversas críticas al modo como se han dado las votaciones. En primer lugar, estas organizaciones afirman que las listas electorales han sido infladas: oficialmente habían sido llamados a voto 2,2 millones de congoleses, sobre una población de 3,6 millones de habitantes. Un dato que según la oposición es exagerado. Se contesta además el índice de participación en el voto, luego de que los seis candidatos habían invitado a sus electores a boicotear las elecciones.
Los datos oficiales de la participación en las votaciones, todavía provisorios, afirman que ha votado el 66,42% de los que tienen el derecho. La oposición, en cambio, afirma que sólo el 15-20% de los electores se presentó en las urnas.
Los observadores de la Unión Africana y de la Comunidad Económica de África central, en cambio, sostienen que las votaciones se desarrollaron de “manera conforme al derecho y según los estándares de transparencia y corrección establecidos”.
Una manifestación de protesta en la capital, Brazzaville, fue despejada por la policía.
Congo Brazzaville es uno de los principales productores de petróleo africano. Su producción diaria de gris es de 220 mil barriles. Sin embargo, la mayor parte de la población no obtiene ningún beneficio de dicha producción. El país, en efecto, está en el puesto 142 de la clasificación mundial del UNDP (programa para el desarrollo de las Naciones Unidas) con un índice de desarrollo humano igual a 0.512. Los Obispos del Congo apoyan a quienes piden una mayor transparencia en la gestión de los recursos naturales del país (ver Fides 1/12/2006). (L.M.) (Agencia Fides 16/7/2009; líneas 34, palabras 429)
