VATICANO - Documento final de la Reunión europea sobre la Pastoral del Turismo hoy: "la pastoral del turismo no puede ser sino una pastoral misionera"

martes, 2 junio 2009

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - "Los cristianos, miembros efectivos y activos de la Iglesia, viven en el 'mundo del turismo' con la conciencia evidente de su fe en sus ámbitos, según las propias competencias y las diversas condiciones de vida. De este modo también los laicos deben hacer presente la identidad y la naturaleza de la Iglesia misionera. Enviada a un mundo secularizado y a menudo indiferente, requiere de sus hijos e hijas un compromiso cada vez más auténtico, también en el ámbito público, en este caso, turístico". “Cuanto más profunda y madura es la fe, más incisiva y urgente es la misión. Esta fe dicta además las reglas del comportamiento en la condición turística". Son las primeras "Recomendaciones" contenidas en el Documento final de la Reunión europea sobre la Pastoral del Turismo a 40 años del Directorio "Peregrinans in terra", que ha tenido lugar en Roma el 29 y 30 de abril por iniciativa del Consejo Pontificio para la Pastoral de los Emigrantes e Itinerantes. En la Reunión han participado los Obispos Promotores y los Directores Nacionales de la Pastoral del Turismo de 20 Naciones europeas, además de algunos expertos y representantes de otros continentes.
El amplio documento está articulado en tres capítulos: Acontecimiento, Conclusiones y Recomendaciones. En la primera parte se presenta la crónica del encuentro, con una síntesis de las intervenciones de los Relatores. Después, en las Conclusiones aprobadas al final de los trabajos, se evidencia ante todo que "la observación atenta del turismo contemporáneo abre un interesante horizonte sobre el cambio antropológico y cultural en acto en Europa". "El turismo actual presenta formas de movilidades múltiples y distintas, cortas y sofisticadas, resultando ardua una comprensión unitaria". "También la Iglesia es interpelada por el turismo como fenómeno social y cultural, capaz de determinar nuevos estilos de vida y dar respuesta a nuevas expectativas de la persona humana. Pero, más específicamente, el llamamiento que se hace a la Iglesia hace referencia a una tríplice e imprescindible tarea: la de 'evangelizar toda criatura', 'reunir el pueblo de Dios disperso' en el nombre de Jesucristo, ofrecer a los turistas ámbitos y 'sentidos' de vida digna y buenos". "La pastoral del turismo no podrá ser sino una 'pastoral misionera', expresión tipologica de una Iglesia ad extra; tendrá las características según el ambiente en el que opera según los tiempos y vivencias propios; expresará modalidades de empeño coherentes con una Iglesia viva, confiada, valiente, creativa, pero siempre fiel". "La atención pastoral a todos los sujetos implicados en el turismo, revela la universal paternidad de Dios, que quiere alcanzar a todos los hombres, en cualquier lugar donde se encuentren, en su diseño de amor. No se trata de excluir sino de incluir, no de seleccionar sino de integrar, no de marginar sino de estar entre el movimiento suscitado por el fenómeno del turismo".
En las Recomendaciones se recuerda que "en la cumbre de toda acción pastoral, también en el turismo, está la celebración eucarística, sobre todo en el Día del Señor. Ello asume un valor central tal que revela la misma Iglesia local. No se deben tampoco desatender las celebraciones de los sacramentos, de las solemnidades devocionales o cultuales, según las costumbres locales, revelándose como de notable importancia para los objetivos de la participación de los fieles, de su edificación espiritual, de su acercamiento a los divinos misterios". "Las Diócesis deben pues, ofrecer una serie de subsidios, dominicales, quizás utilizando imágenes del patrimonio artístico local, proponiendo itinerarios a lugares del espíritu, desarrollando la producción de cantos y músicas de carácter litúrgico o meditativo". "Es posible 'anunciar el Evangelio' como sentido nuevo por los viajes, por descubrir en medio de lo bello e inmenso. Es necesario que cada comunidad, sobre todo las que trabajan más en este ámbito, se preocupen realmente de esta misión y lo consideren prioritario, lo cual implica una red de corresponsabilidad por crear e incluir en los planes pastorales". "El turismo es un fenómeno humano y en cuanto tal es una realidad poliédrica y transversal, con elementos ambivalentes. Pero la iglesia, en su solicitud pastoral, está llamada a subrayar de modo particular los valores positivos que el turismo lleva naturalmente consigo, antes que dar curso a deprimentes diagnósticos". "Por lo que concierne a la reducción de la pobreza en el mundo, gracias al turismo, se recomiendan al menos dos filones de atención. Por una parte, el aumento de las inversiones financieras; el alza de los estándares de servicio y la promoción del aprendizaje y la formación, por ej. con el turismo estudiantil. Por otra parte se recomienda la salvaguardia de los recursos no renovables, petróleo, agua, energía y la atención a no sustraer con el turismo la tierra a la agricultura y al trabajo”. "Por desgracia el turismo no ha entrado todavía en los proyectos pastorales de muchas diócesis y Conferencias Episcopales. Se recomienda que lo haga . la pastoral del turismo, debe considerarse en efecto, como parte integrante, esencial e integrada (pastoral de conjunto) de la eclesial". (S.L) (Agencia Fides 2/6/2009)


Compartir: