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Madrid (Agencia Fides) - Este fin de semana, 2 y 3 de mayo, cinco mil niños han participado en el III Encuentro Nacional de la Infancia Misionera que se ha celebrado en la Casa de Campo de Madrid, según informa la Agencia Ompress de las Obras Misionales Pontificias de España. El Encuentro, organizado por las OMP, ha estado precedido de una gran preparación durante los últimos dos meses, con encuentros diocesanos y marchas misioneras, que fueran acercando a los niños al contenido de esta cita misionera. Más de 100 autobuses venidos de toda la geografía española se sumaron a los numerosos participantes de Madrid. El lema del Encuentro era “Hoy y mañana ¡somos misioneros!”. El encuentro buscaba ser "una fiesta pensada para hacer crecer la amistad entre ellos y con los niños de todo el mundo, al tiempo que descubren la dimensión universal de su formación cristiana y humana a través de un recorrido por los cinco continentes".
El sábado comenzaron las actividades con la presentación del encuentro a María, Reina de las Misiones, que con una gran imagen que presidió todos los actos. Mons. Francisco Pérez González, Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias y Arzobispo de Pamplona-Tudela, dio la bienvenida a los niños, los cuales llevaban pañoletas y gorras de los cinco continentes (amarillo-Asia, azul-Oceanía, blanco-Europa; rojo-América, verde-África). Tras traer a la memoria el decálogo misionero, las pautas que les pueden ayudar a ser ya pequeños misioneros, en el transcurso de la jornada se mostró a los niños la realidad de los cinco continentes, a través de breves vídeos y variadas actividades: un contador de cuentos amenizó la parte dedicada a Asia; África contó con la participación de un grupo de danza africano; un mago descubrió a los niños la belleza de Oceanía; con el arte de unas marionetas se mostró a los niños la realidad de América; por último, el continente europeo se amenizó con la presencia de unos payasos.
La primera jornada de este encuentro finalizó con un momento de oración escenificado que recordó la tarea misionera de los apóstoles reunidos en Pentecostés y enviados a todo el mundo, y la lectura del mensaje que su Santidad Benedicto XVI envió a los participantes del encuentro en el que invita a todos los niños a “crecer en la amistad con Jesús, el amigo que nunca falla, mediante la oración y los sacramentos, para hablar de Él con entusiasmo a quienes tal vez no han tenido la alegría de conocerlo”. Asimismo, les anima a “observar las diversas partes de la tierra, para tomar conciencia de sus bellezas y necesidades, e ir asumiendo ya desde ahora la responsabilidad de llevar a todas ellas la luz del Evangelio y su mensaje de paz, así como la ayuda fraterna, especialmente a los más necesitados”.
El domingo, día 3 de mayo, después de la marcha misionera, donde los niños fueron los protagonistas con sus banderas y pancartas, tuvo lugar la Misa de clausura presidida por el arzobispo de Madrid, Card. Antonio María Rouco, y concelebrada por Mons. Francisco Pérez, Arzobispo de Pamplona, y los obispos de Astorga Mons. Camilo Lorenzo y de Jaén, Mons. Ramón del Hoyo, además de numerosos sacerdotes. A lo largo de esta celebración litúrgica, los niños expresaron en todo momento la alegría de sentirse misioneros, con sus cantos y su participación activa en la misma. En la homilía, el arzobispo de Madrid dijo que puede llamarse misionero el que "conoce, ama y sigue a Jesús" y que Dios necesita la ayuda de los niños para que "su amor se expanda". Durante el ofertorio, se ofreció junto al pan y el vino, la aportación económica de la Infancia Misionera para 2008. (RG) (Agencia Fides 5/5/2009)
