AMERICA/MEXICO - Los Obispos “preocupados por los graves síntomas de descomposición social” abren la Asamblea Plenaria con la consagración del país al Espíritu Santo

martes, 21 abril 2009

Ciudad de México (Agencia Fides) – “Esta semana que comienza, los Obispos, con la colaboración de los Vicarios Episcopales de Pastoral, nos proponemos: Discernir el camino de renovación pastoral de las parroquias, a la Luz de Aparecida y en el impulso de la Misión Continental en México, a fin de ofrecer directrices de acción para las Provincias y las Diócesis”. Con estas palabras definía Mons. Carlos Aguiar Retes, Arzobispo de Tlalnepantla y Presidente de la Conferencia Episcopal de Mexico (CEM) durante la Eucaristía de inicio, el objetivo de la 87 Asamblea Plenaria que comenzó ayer día 20 hasta el 24 de abril dentro de las instalaciones de Sede de la CEM. En el día de ayer los Obispos han celebrado dos eventos paralelos de gran relevancia para la vida de la Iglesia. El primero de ellos es la Renovación de la Consagración de México al Espíritu Santo, celebración que se retoma por tercera ocasión en la historia de la Iglesia de México y que cobra pertinencia en estos momentos de dificultad por los que este atraviesa. En este contexto, los Obispos han considerado necesario renovar compromisos y unirse en oración. El segundo es la celebración del día del Papa día en que los Obispos han redactado la carta de felicitación a Su Santidad Benedicto XVI en su 4º año de Pontificado.
Durante la Celebración Eucarística para dar inicio a la 87 Asamblea de la CEM y consagrar a México al Espíritu Santo, se reunieron más de 120 obispos de México y participaron representantes de las Regiones Eclesiásticas de la República durante la cual se pidió la ayuda especial del Espíritu Santo en la vida de los mexicanos.
“Tenemos una intención bien definida – continúa el Presidente de la Conferencia Episcopal - de renovar las parroquias y hacerlas lugar de encuentro con Jesucristo, casa y escuela de la comunión, instancia de formación y crecimiento espiritual de los cristianos, y plataforma de convocación y articulación para la vida y misión de la comunidad de discípulos”. Objetivo que según Mons. Aguiar se une al de la anterior Asamblea que estuvo orientada a la misión de los fieles laicos, desde y en sus lugares de trabajo. Con todo ello se busca “clarificar, revitalizar y fortalecer, a la luz del Documento de Aparecida y la Carta Pastoral 2000, la Misión Continental en México, estableciendo las líneas estratégicas a seguir, a fin de impulsar la misión propia de los laicos en la cultura, la economía, la política y los medios de comunicación”.
Los Obispos consideran que la Iglesia Católica en México “debe intensificar su positiva presencia en la sociedad para reconstruir y fortalecer el tejido social, debe formar a los católicos y acompañarlos orgánicamente desde la Parroquia y la Diócesis, desde la Provincia Eclesiástica, y desde la Conferencia Episcopal para que los fieles católicos hagan presente el amor del Padre en el mundo actual, conducidos por el Espíritu Santo, a ejemplo de Jesucristo, el Señor”.
Pero conscientes de que esta labor sólo es posible por el don del Espíritu Santo, “los Obispos de México reunidos aquí en la casita del Tepeyac, a los pies de nuestra madre de Guadalupe, para iniciar una histórica Asamblea Plenaria, la octogésima séptima, por acuerdo unánime, vamos, al final de esta Eucaristía, a renovar la Consagración de México al Espíritu Santo”. Renuevan así lo que ya hicieron sus antecesores el 12 de Octubre de 1924 durante la celebración del primer Congreso Eucarístico Nacional, “preocupados por los graves síntomas de descomposición social, tanto ayer como hoy, queremos proclamar que en Jesucristo el bien ha vencido al mal, y que esta experiencia puede y debe repetirse en nuestra querida Patria”. De este modo ayer fue consagrado todo el país al Espíritu Santo, y luego cada Obispo en su Diócesis consagrará su propia Iglesia particular, el domingo 31 de mayo, en la Solemnidad de Pentecostés.
Esta Consagración, según han explicado tiene un profundo sentido de esperanza para que el país supere los grandes desafíos que le propone el clima actual de inseguridad, exceso de violencia y el narcotráfico.
Durante esta Asamblea, según ha informado el Secretario General de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Mons. Leopoldo González, los presidentes de los diversos partidos políticos expondrán sus programas electorales a los Obispos a invitación de estos. “El objetivo – ha explicado Mons. Leopoldo - es escucharlos para que presenten su plataforma y animarlos en sus promociones, sobre todo cuando está de por medio el bien de la nación con los valores humanos". (RG) (Agencia Fides 21/4/2009)


Compartir: