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Managua (Agencia Fides) - Cientos de feligreses católicos, junto con algunos Obispos nicaragüenses y el Nuncio Apostólico, marcharon ayer por las calles de Estelí (norte) en contra del aborto en ocasión del Día del Niño por Nacer. La manifestación recorrió poco más de un kilómetro y culminó con una misa al aire libre en las afueras de la Catedral de Estelí, 149 kilómetros al norte de Managua. El objetivo de la marcha era transmitir a la población un mensaje por la vida y contra la muerte. De acuerdo con los organizadores participación en la marcha más de 10.000 personas.
La Eucaristía estuvo presidida por el Obispo de la diócesis de Estelí, Mons. Juan Abelardo Mata, con la participación del Nuncio Apostólico en Managua, Mons. Henry Jósef Nowacki y Mons. Enrique Herrera, Obispo de Jinotega. En la homilía Mons. Juan Abelardo afirmó que muchos “dicen defender los derechos humanos y por otro lado promueven el aborto”. También dijo que la mujer debe respetarse y respetar su cuerpo “lo cual implica no sólo decir mi cuerpo es mío, sino responder al plan de su Creador”. Además de esta marcha se han realizado numerosas jornadas de oración para pedir por la vida en las diferentes diócesis del país.
El director nacional de la Asociación Nicaragüense pro Derechos Humanos (ANPDH), Roberto Petray, informó que junto con esta actividad realizada el Día Nacional del Niño por Nacer, se ha enviado también un mensaje a las personas que desean instaurar nuevamente el aborto terapéutico, recordando que el derecho a la vida es inviolable.
En efecto, la legislación nicaragüense prohíbe cualquier tipo de aborto, pues el Parlamento nicaragüense, en el contexto de la campaña por las elecciones presidenciales de 2006, se hizo eco de peticiones de las iglesias Católica y Evangélica para derogar el aborto terapéutico, realizado en caso de peligro para la madre, que figuraba en el Código Penal del país desde hacía más de un siglo. La legislación facultaba a practicar este tipo de interrupción del embarazo si era "determinado científicamente, con la intervención de tres facultativos por lo menos, y el consentimiento del cónyuge o pariente más cercano a la mujer, para los fines legales".
La organización de derechos humanos ANPDH está intentando que la Corte Suprema de Justicia se pronuncien a favor de que prevalezca la penalización de todo tipo de aborto, frente a un grupo de mujeres que recurrió esta prohibición por considerarla inconstitucional ante la Corte Suprema de Justicia, que aún no se ha pronunciado. “Nosotros estamos trabajando para proteger la vida de los más inocentes”, ha afirmado Petray. (RG) (Agencia Fides 26/3/2009)
