AMERICA/COLOMBIA - Los Obispos expresan su dolor por la masacre de indigenas y reiteran su disposición de colaborar en el proceso de paz

jueves, 12 febrero 2009

Bogotá (Agencia Fides) – La Iglesia Católica en Colombia ha reiterado su total disposición de participar y aportar a los procesos de diálogo con los diferentes grupos armados. Así lo han expresado varios Obispos, al iniciar en Bogotá la Octogésima Sexta Asamblea Plenaria del Episcopado.
El Presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), Monseñor Rubén Salazar Gómez, ha afirmado que “siempre estamos abiertos al diálogo profundo con todas las instancias. Estamos dispuestos a involucrarnos como facilitadores... a poner nuestro grano de arena a favor de la paz”. A su vez el Cardenal Pedro Rubiano Sáenz, afirmó que “estamos dispuestos a colaborar con todo lo de la paz. Todo lo que se haga por la paz y por la libertad de los secuestrados es importante”. El Obispo de Cúcuta, Monseñor Jaime Prieto Amaya, aseguró que se debe trabajar para “crear confianza entre las partes” y confió en que con las propuestas recientes expresadas por el Gobierno y por las FARC se logre avanzar en el regreso a la libertad de todas las personas en poder de ese grupo guerrillero.
Por otro lado el Obispo de Tumaco, Mons. Gustavo Girón Higuita, ha manifestado su preocupación por la situación en que vive la comunidad indígena Awá, tras conocerse informaciones sobre una masacre contra integrantes de esa étnia en zona rural de Barbacoas (Nariño). “Estamos muy preocupados por el pueblo Awá, es un pueblo bastante desprotegido y que en los últimos cinco años ha estado recibiendo como una especie de acoso por parte de los grupos armados”, afirmó Mons. Girón Higuita, cuya Jurisdicción comprende al municipio de Barbacoas. El Obispo de Tumaco explicó que el pueblo Awá “es pacífico, quiere el respeto a su organización y busca recuperar sus tradiciones, los hemos venido acompañando en este proceso y por eso nos duele mucho esto”.
A su vez el Presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), Monseñor Rubén Salazar Gómez, calificó como “muy grave” el hecho y dijo que se trata de “un crimen que todo el país debe condenar”.
Según informó el diario colombiano La Nación, "el asesor de paz de la Gobernación de Nariño, Xavier Hernández, confirmó el asesinato de 17 indígenas, entre ellos tres menores de edad y la desaparición de otros seis entre los municipios de Samaniego y Barbacoas en el piedemonte costero donde hay presencia de grupos armados de Los Rastrojos y las guerrillas de las FARC y el ELN". (RG) (Agencia Fides 12/2/2009)


Compartir: