VATICANO - El Santo Padre a la Comisión mixta internacional para el Diálogo teológico entre la Iglesia Católica y las Iglesias Orientales Ortodoxas: "El mundo tiene necesidad de un signo visible del misterio de la unidad que existe entre las tres divinas Personas y que, hace dos mil años, con la Encarnación del Hijo de Dios, se nos ha revelado”

lunes, 2 febrero 2009

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - Al término de la Reunión de la Comisión mixta internacional para el Diálogo teológico entre la Iglesia Católica y las Iglesias Orientales Ortodoxas, del 30 de enero el Santo Padre Benedicto XVI ha recibido en audiencia a los participantes. "Al término de esta semana de intenso trabajo - ha dicho el Papa en su discurso - podemos dar juntos gracias al Señor por vuestro firme compromiso en la búsqueda de la reconciliación y la comunión en el Cuerpo de Cristo que es la Iglesia”.
"El mundo tiene necesidad de un signo visible del misterio de la unidad que existe entre las tres divinas Personas - ha subrayado el Pontífice - y que, hace dos mil años, con la Encarnación del Hijo de Dios, se nos ha revelado... Nuestra comunión a través de la gracia del Espíritu Santo en la vida que une al Padre y al Hijo tiene una dimensión perceptible en la Iglesia, el Cuerpo de Cristo, "la plenitud del que lo llena todo en todos" (Ef 1:23), y tenemos el deber de trabajar para que se manifieste esta dimensión esencial de la Iglesia en el mundo”.
Benedicto XVI ha recordado a continuación con satisfacción que en este sexto encuentro “se han dado pasos importantes en el estudio de la Iglesia como comunión", además del hecho de que "el diálogo haya continuado en el tiempo y que cada año sea acogido por una de las diversas Iglesias a las que representáis es en sí mismo un signo de esperanza y de ánimo. Sólo necesitamos volver la mirada al Oriente Medio -de donde muchos de vosotros procedéis- para ver que se necesitan con urgencia semillas de esperanza en un mundo herido por la tragedia de la división, el conflicto y el inmenso sufrimiento humano”.
Por último, citando la reciente Semana de Oración por la unidad de los Cristianos, concluida en la Basílica de San Pablo, el Santo Padre ha destacado que "Pablo fue el primer gran campeón y teólogo de la unidad de la Iglesia. Sus esfuerzos y luchas estaban inspiradas por la permanente aspiración de mantener una visible, no meramente exterma, sino real y plena comunión entre los discípulos del Señor. Por tanto, por intercesión de Pablo, pido que Dios os bendiga a todos vosotros, y a todas las Iglesias y pueblos a los que representáis”. (S.L) (Agencia Fides 2/2/2009; Líneas: 30 Palabras: 453)


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