VATICANO - Benedicto XVI a una delegación ecuménica de Finlandia: "Junto, demos gracias a Dios por todo lo que se ha conseguido hasta ahora en las relaciones entre luteranos y católicos, y pidamos para que el Espíritu de verdad nos conduzca hacia una unidad cada vez mayor al servicio del Evangelio"

martes, 20 enero 2009

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - "Queridos amigos de Finlandia, os doy con gran alegría que la bienvenida con ocasión de esta vuestra visita anual a Roma para la fiesta de vuestro santo patrono, San Enrique… Estas peregrinaciones son una oportunidad para rezar juntos, para reflexionar y para dialogar al servicio de nuestra búsqueda de comunión plena". Con estas expresiones de bienvenida se ha dirigido el Santo Padre Benedicto XVI a los miembros de una delegación ecuménica de Finlandia, recibidos en audiencia el 19 de enero.
Subrayando que la visita se desarrolla durante la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, que este año tiene por tema "que formen una cosa sola en tu mano" (Ez 37, 15-23), el Santo Padre ha explicado que esta visión del profeta, "en el contexto ecuménico, nos habla de Dios, que constantemente nos empuja hacia una unidad más profunda en Cristo, renovándonos y liberándonos de nuestras divisiones”.
El Papa también ha recordado el décimo aniversario de la Declaración común sobre la Justificación, "y la Comisión está ahora estudiando sus implicaciones y la posibilidad de su recepción. Con el tema Justificación en la Vida de la Iglesia, el diálogo está considerando cada vez más plenamente la naturaleza de la Iglesia como signo e instrumento de salvación en Jesucristo y no simplemente como una mera asamblea de creyentes o una institución con diversas funciones".
"Vuestra peregrinación a Roma - ha continuado el Pontífice - se realiza en el Año Paulino, bimilenario del nacimiento del apóstol de las Naciones, quien dedicó incansablemente su vida y la enseñanza propia a la unidad de la Iglesia. San Pablo nos recuerda la gracia maravillosa que hemos recibido convirtiéndonos en miembros del Cuerpo de Cristo por medio del Bautismo. La Iglesia es este Cuerpo Místico de Cristo y es conducida constantemente por el Espíritu Santo, el Espíritu del Padre y del Hijo…También aprendemos de Pablo que la unidad a la que aspiramos no es otra que la manifestación de nuestra plena incorporación al Cuerpo de Cristo".
Deseando que esta visita a Roma "refuerce ulteriormente las relaciones ecuménicas entre luteranos y católicos en Finlandia, que son tan positivas desde hace tantos años", el Santo Padre ha concluido su discurso con esta exhortación: "Juntos, demos gracias a Dios por todo lo que se ha conseguido hasta ahora en las relaciones entre luteranos y católicos, y pidamos para que el Espíritu de verdad nos conduzca hacia una unidad cada vez mayor al servicio del Evangelio". (S.L) (Agencia Fides 20/1/2009; Líneas: 33 Palabras: 463)


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