VATICANO - El Papa recuerda en el ángelus que el Bautismo es "regalo, alegría, pero también responsabilidad", ya que los padres y padrinos "deben educar a sus hijos según el Evangelio", e invita a rezar por el VI Encuentro Mundial de las Familias

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - Después de haber administrado el sacramento del Bautismo a un grupo de niños en la Capilla Sixtina, el Santo Padre Benedicto XVI se ha asomado a la ventana de su estudio, el domingo 11 de enero, para recitar el ángelus con los fieles reunidos en la plaza de San Pedro. Recordando la fiesta del Bautismo del Señor, el primer acto de la vida pública de Jesús, que se celebra en el primer domingo después de la Epifanía, el Papa ha subrayado que en las palabras del evangelista, pronunciadas por la voz desde el cielo: "Tú eres mi Hijo, amado: en ti me complazco" (Mc 1,10-11), “se revela qué es la vida eterna: es la relación filial con Dios, tal y como Jesús la vivió y nos la ha revelado y entregado”.
El Santo Padre ha continuado, citando el ritual del Bautismo: " la persona humana, mediante el Bautismo, se inserta en la relación única y singular de Jesús con el Padre, de forma que las palabras que resonaron en el cielo sobre el Hijo Unigénito se hacen verdaderas para cada hombre y toda mujer que renacen del agua y del Espíritu Santo: Tu eres mi Hijo, el amado. Queridos amigos, ¡qué grande es el don del Bautismo! Si nos diéramos cuenta plenamente, nuestra vida se convertiría en un 'gracias' continuo. ¡Qué alegría para los padres cristianos, que han visto surgir de su amor a esta nueva criatura, llevarla a la fuente bautismal y verla renacer del seno de la Iglesia, para una vida que nunca tendrá fin! ¡Regalo, alegría, pero también responsabilidad! Los padres, de hecho, junto con los padrinos, deben educar a sus hijos según el Evangelio”.
A este propósito Benedicto XVI ha recordado el tema del VI Encuentro Mundial de las Familias de la Ciudad de México - "La familia formadora en los valores humanos y cristianos" - que se desarrollará en tres momentos: el Congreso Teológico-pastoral, el momento de fiesta y testimonio y la solemne Celebración eucarística como acción de gracias al Señor por los dones del matrimonio, la familia y la vida. “He encargado al cardenal Secretario de Estado Tarsicio Bertone - ha dicho el Papa - que me represente, pero yo mismo seguiré con viva participación el extraordinario acontecimiento, acompañándolo con la oración e interviniendo en videoconferencia. Desde ahora, queridos hermanos y hermanas, os invito a rezar por este importante encuentro mundial de las familias la importancia de las gracias divinas. Lo hacemos invocando la materna intercesión de la Virgen María, reina de la Familia”. (S.L) (Agencia Fides 12/1/2009; Líneas: 31 Palabras: 469)