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Harare (Agencia Fides)- Mientras el Presidente de Zimbabwe, Robert Mugabe, anuncia que la epidemia de cólera ha sido “bloqueada”, Sudáfrica ha declarado su frontera con Zimbabwe (al norte del país) en emergencia médica por la aparición de algunos casos de cólera.
Es grotesco el contraste entre las palabras de un Presidente que cada vez parece más desacreditado al exterior y cuyo poder parecería estar en discusión por el descontento de la población y de los militares (ver Fides 10/12/2008) y una realidad que continua a ser grave.
Las palabras de Mugabe parecerían dictadas por el temor creciente de una operación militar externa realizada con la escusa de una acción humanitaria para salvar a la población de la epidemia. De hecho el presidente habría declarado: “ahora que ya no hay cólera no hay ningún motivo para la guerra”.
Por el momento, esta posibilidad sólo está siendo discutida en algunos ambientes de la diplomacia internacional pero al parecer Mugabe y sus colaboradores la han tomado en serio. En concreto la prensa del régimen acusa a dos países fronterizos, Botswana y Zambia, de estar realizando preparativos para una operación conjunta para invadir Zimbabwe, con el pretexto de una operación humanitaria. El tono de la polémica se ha encendido de tal manera que el Ministro del Exterior y el de Defensa de Zambia han tenido que desmentir públicamente la existencia de un plan conjunto con Botswana para invadir Zimbabwe.
Varios líderes extranjeros le han pedido a Mugabe (que tiene 84 años) de renunciar para favorecer una solución a la gravísima crisis política, económica, social y humanitaria en la que se encuentra sumergido el país. Por ejemplo, la Canciller alemana Angela Merkel, durante un evento en Berlín organizado por el 60º Aniversario de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre, declaró: “en relación al caso de Zimbabwe tenemos que hacer todo lo que este a nuestro alcance para garantizar una vida libre del terror del presidente Mugabe. La escusa de la soberanía nacional no puede ser usada a favor de la violación de los derechos humanos de manera grave y sin ningún freno”. Además de la señora Merkel, el Presidente de los Estados Unidos, George Bush, el de Francia, Nicolás Sarkozy, que es también el Presidente de turno de la Unión Europea, el Premier Británico Gordon Brown y el de Kenia, Raila Odinga, han pedido la renuncia de Mugabe. (L.M.) (Agencia Fides 11/12/2008 líneas 31 palabras 415)
